Tensión en el juicio que sienta en el banquillo al otro 'Niño'

Con más de media hora de retraso con respecto a la hora fijada, ha arrancado el juicio que sienta en el banquillo al narcotraficante de Sanlúcar Iván Odero y a los integrantes de la banda que lideró hasta su detención en 2009.

Las defensas han planteado una batería de cuestiones previas para convencer al tribunal de la Audiencia Provincial que anule la prueba principal del caso: las intervenciones telefónicas que permitieron conocer los movimientos de la banda.

De los 13 acusados, sólo tres continúan en prisión: Iván Odero, su hermano David y su mano derecha en la organización, según la Fiscalía Antidroga, David Rodriguez.

Los tres han ocultado en todo momento sus rostros al llegar esposados a la Audiencia y también dentro del edificio cuando han sido conducidos a la sala de vistas.

Familiares de los acusados han increpado a los periodistas y han intentado impedir que sacaran imágenes de los líderes de la banda.

Dentro de la sala y con las cámaras fuera, ya se ha podido ver la nueva imagen de Iván Odero, muy transformada y distinta a cuando su rostro salió por primera vez en los medios. Fue en 2009, cuando estalló la 'operación Q7' que hoy ha comenzado a juzgarse.