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Qué ver en Granada: la Alhambra y otros monumentos que debes visitar

Repasamos algunos de los lugares imperdibles para un viaje a Granada de dos o tres días

Granada: qué ver y qué hacer

Granada Actualizado: Guardar
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Granada se está convirtiendo en un lugar de referencia para el turismo nacional y extranjero. Cada vez son más los que deciden viajar a esta ciudad de Andalucía, enclavada al pie de Sierra Nevada, para perderse en sus rincones durante dos o tres días. Es poco tiempo, pero el suficiente para disfrutar de su gastronomía, conocer su idiosincrasia y visitar algunos de losmonumentos más importantes de la capital granadina, como lo son los siguientes:

La Alhambra (y el Generalife)

Sobran las presentaciones. La fortaleza narazarí es de paso obligado para los visitantes que quieran disfrutar de un monumento sinigual, superviviente a la historia, donde las culturas musulmana y cristiana se funden. Las entradas a los palacios islámicos y los jardines del Generalife, que rondan los 15 euros, deben reservarse con días de antelación.

No en vano, es uno de los monumentos españoles más visitados y está recogido en la lista de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

La Catedral

Fueron los Reyes Católicos quienes mandaron construir la Catedral de Granada tras la toma de la ciudad. El inicio de su construcción data de 1505. Compuesta por una quincena de capillas, se trata de una de las obras más significativas del renacimiento español, aunque también incorpora elementos góticos. Está abierta al público todos los días en horario interrumpido y el precio es de 5 euros.

La Capilla Real

Junto a la Catedral, los Reyes Católicos decidieron ubicar su lugar de enterramiento. En la Capilla Real de Granada reposan los restos de Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón. La visita turística está disponible diariamente.

La Abadía del Sacromonte

La Abadía del Sacromonte, que corona el monte del barrio del que recibe su nombre, es uno de los monumentos más desconocidos y enigmáticos de Granada. Se trata de un complejo compuesto por la propia abadía, así como dos colegios mayores y unas catacumbas que conectan con un templo. Comenzó a construirse en el siglo XVII después de hallar en el lugar reliquias de tres mártires –San Cecilio, San Tesifón y San Hisicio- junto a unas misteriosas placas de plomo, conocidas como libros plúmbeos.

El Carmen de los Mártires

Al lado de la Alhambra se encuentra el Carmen de los Mártires, un conjunto de jardines románticos rodeados de misticismo e historia. En la zona más alta mandó Isabel la Católica construir la primera iglesia de Granada, una ermita en conmemoración a los mártires cristianos que fueron perseguidos durante el periodo de dominación musulmana. El conjunto se convirtió más tarde un convento y, posteriormente, en un palacete de recreo. Este lugar fue también punto de encuentro para la masonería, cuyos integrantes locales mantenían reuniones en el torreón que aún hoy se conserva. La entrada es libre mañanas y tardes.

El Albaicín y el Sacromonte

Reconocido como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, el barrio del Albaicín es una de las joyas más preciadas de Granada, el corazón en torno al cual creció la ciudad desde los comienzos de la etapa islámica. Sus casas encaladas y los aljibes del sistema de canalización de agua son un verdadero legado andalusí que permanece ajeno al paso del tiempo. La orografía del barrio ofrece preciosas panorámicas de la Alhambra desde rincones como el famoso Mirador de San Nicolás, la escurridiza Placeta de Carvajales o el Mirador de San Cristóbal, donde el expresidente estadounidense Bill Clinton aseguró haber contemplado la más bella puesta de sol.

Junto a este barrio moro se halla el Sacromonte, cuna del flamenco e histórico barrio gitano de Granada. En sus zambras subterráneas, todavía decoradas con viejos aperos, se realizan espectáculos folclóricos. El Museo de las Cuevas del Sacromonte recupera y reivindica la memoria del entorno, los oficios y costumbres de los habitantes de las cuevas.

Huerta de San Vicente

La Huerta de San Vicente fue la residencia estival de la familia del poeta Federico García Lorca, que da nombre al parque municipal que rodea la casa. Allí, en mitad de la Vega de Granada, su escritor más universal pasaba los veranos. La decoración del interior recrea con la máxima fidelidad posible la realidad que vivieron los García Lorca durante los años en los que dispusieron de este entorno, donde se pueden contemplar el escritorio o el piano con los que creaba Federico. Una exposición permanente revisa la historia de la casa, por la que han pasado multitud de artistas vinculados al poeta, como Leonard Cohen, Compay Segundo, Enrique Morente o Patti Smith. Abre de 9 de la mañana a 3 de la tarde. El precio de la entrada –con visita guiada– es de 3 euros para los adultos, 1 euro para jóvenes y estudiantes.

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