Los alumnos «repetidores» de la Selectividad en Extremadura: «El examen ha sido fácil, pero que no vuelva a pasar»
Un total de 4.594 estudiantes afectados por la filtración de exámenes repitieron ayer las pruebas que les tocaban entre el alivio por terminar y el enfado
« Se acabó, se acabó, se acabó », decía ayer una estudiante que salió corriendo de la Facultad de Económicas, en el campus de Badajoz de la Universidad de Extremadura. Se abrazó a una compañera y remató su frase: « Por fin ». El alivio por terminar la Selectividad fue el sentimiento predominante entre los 4.594 estudiantes que se vieron obligados a repetir alguno de sus exámenes debido a la filtración de las pruebas .
«Estoy bastante contenta por terminar, con buenas sensaciones. Lo han puesto bastante asequible», indicó ayer Sara Calderón, del IES San Fernando de Badajoz, al salir de su segundo examen de Matemáticas en EBAU. A pesar de estar satisfecha, explicaba que han sido unos días duros. «Fue horrible. A mí incluso me venía bien repetirlo, porque el primero no fue bien, pero simplemente pensar que tenía que coger otro libro, se me venía el mundo encima». Ayer, al salir por fin se marchó de compras con sus amigas a buscar un vestido para la graduación. Todas sonreían.
Lejos de la pesadumbre evidenciada en las jornadas precedentes, en el campus de Cáceres el ambiente ayer también era de cierto alivio entre aquellos que aprovecharon la situación para convertir la prueba en una segunda oportunidad y firmar mejores ejercicios.
Sobre todo en el caso de Matemáticas, una materia que para algunos de los estudiantes pasó de ser el talón de Aquiles a convertirse en una prueba de la que salieron airosos. Así lo reconocía Jesús Santano , del IES San Pedro de Alcántara. « Estoy encantado. Ha sido más sencillo y me ha salido mucho mejor que el anterior ». Pablo Acero , procedente del IES Santa Lucía del Trampal, en Alcuéscar (Cáceres), opinó de manera similar. «He salido muy contento, porque el examen ha sido más fácil. Si lo comparamos con el otro, en este sacaría una nota superior».
Pese a que muchos aseguraron que la prueba fue más fácil, desde la Universidad se señaló que no fue así bajo ningún concepto. Es decir, que no hubo ninguna intención de «levantar la mano» tras lo ocurrido. «No es verdad que hayan sido más fáciles. Ha sido de un nivel de complejidad similar, garantizado por los especialistas», zanjó el rector de la Universidad de Extremadura, Segundo Píriz .
Como dijo el rector, la sensación en otras asignaturas no fue de mayor facilidad. Carla Parra hacía balance tras volver a examinarse de Latín: «Me ha salido muy bien, igual que el que anularon. Aunque ha sido ligeramente más difícil, a mí no me ha afectado», explica la joven.
Más de un estudiante se fue a casa disgustado y acordándose de su examen de la semana anterior. Hubo quejas, por ejemplo, entre los que se presentaron a «Matemáticas aplicadas a las ciencias sociales» porque en este caso consideraba que sí era más difícil. Manuel Bazaga entraba enfadado ayer a la Facultad de Económicas. «Yo tenía un examen de 10 la semana pasada y aquí estoy. Es una vergüenza que en pleno siglo XXI pasen estas cosas». Esta reflexión también se repitió entre muchos de los estudiantes consultados ayer. A pesar del alivio por cerrar este estresante episodio, esperan que una «chapuza» así (la expresión más usada) no se vuelva a repetir.
Abono de gastos
Algunos de los estudiantes de fuera de la ciudad elevaron ayer a la instancia pertinente para que la Universidad de Extremadura les abone los gastos originados por el desplazamiento extra, en la mayor parte de los casos, así como por el alojamiento y la manutención en otros casos puntuales.
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