Papaya: rica en papaína, este fruto es bueno para solucionar problemas causados por una ingesta excesiva de grasa.
Hinojo: calma los dolores intestinales y evita la formación de gases. Además estimula la digestión y elimina la pesadez. Es eficaz contra los dolores cólicos por su efecto espasmolítico y, como la mayoría de las plantas que contienen aceites esenciales, el hinojo tiene además propiedades antimicrobianas.
Alcachofa: sus hojas basales tienen un elevado contenido en compuestos fenólicos como la cinarina que contribuyen a mejorar la función de la vesícula biliar y son hepatoprotectores (protegen las células del hígado). También se ha comprobado que ayudan a reducir el colesterol, tienen acción antioxidante y favorecen la eliminación de líquidos por su efecto diurético. Por todo ello se puede considerar a las hojas de alcachofera como un depurativo eficaz para mejorar la digestión de las grasas y de gran interés como coadyuvante de las dietas hipocalóricas de control de peso, según los expertos del Centro de Investigación en Fitoterapia (INFITO) .
Melisa: ayuda a tratar las flatulencias, la colitis y los espasmos intestinales y digestivos. Consideradas ya por Paracelso en el s XVI como el «elixir de la vida» se ha venido empleando desde hace muchísimos años como remedio tradicional para combatir los estados de nerviosismo.
