El Bernabéu empieza fuerte la temporada: pitos a Bale y Cristiano

A cuatro días del inicio de la Liga, el color verde resalta bastante más que el blanco en el nuevo Real Madrid comandado por Rafa Benítez. El equipo merengue cerró ante el Galatasaray una pretemporada bastante discreta, marcada por la fiabilidad defensiva (solo tres goles encajados en ocho partidos) pero con muchas carencias cuando el balón se mueve de tres cuartos de campo en adelante. Ahí, esa extraña y antinatura colocación de las piezas (Isco, derecha; Bale, mediapunta; y Cristiano, izquierda) resta más que suma.

No es casualidad que dos de los tres componentes de esa línea que Benítez coloca tras el «9» recibieran anoche la música de viento del Santiago Bernabéu. Comprensible lo de Bale, más perdido que Jack Shepard en su nuevo rol de enganche.

Ni combina, ni inventa, ni desborda. Exaspera a la parroquia. ¿Jugará alguna vez de «11»? Son ya más de dos temporadas fuera de su sitio. Tan fácil. Tan difícil.

No tan lógicos fueron los pitos a Cristiano. A pesar de errar una ocasión clamorosa, el jugador franquicia debería ser intocable. Pero el Bernabéu es especial hasta para eso. Aún así, Benítez no duda: «Estoy seguro que la afición será clave esta temporada», dijo tras el encuentro.

Brindis a la cantera

Antes del inicio del encuentro, «La Fábrica» tuvo su pequeño homenaje en el estreno de los blancos esta temporada ante su público. Kiko Casilla, Lucas Vázquez y Cheryshev, los tres canteranos que este verano han regresado a su casa, además de Casemiro, con pasado en el Castilla, fueron presentados en el Santiago Bernabéu bajo el lema de «juventud, trabajo, calidad e ilusión». Junto a Danilo (y desde hoy Kovacic) son las seis caras nuevas de los blancos en esta primera campaña de la era Benítez que arranca oficialmente el domingo en El Molinón. Allí ya no valen las pruebas. Ante un recién ascendido, es ganar o ganar.