Provincia
Exploran un antiguo refugio antiaéreo en Cádiz y encuentran habitaciones, objetos de la época y un gran tesoro: «No me lo puedo creer»
En el subsuelo del Peñón de Gibraltar se mantienen casi intactas antiguas y grandes instalaciones militares, la mayoría abandonadas en la actualidad
Recorren un antiguo túnel subterráneo en la provincia de Cádiz y encuentran sorprendentes inscripciones en las paredes
Si la provincia de Cádiz ya es un tesoro en sí misma por todo lo que ofrece sobre tierra, inimaginable es su valor si tenemos también en cuenta el gran legado histórico que guarda bajo ella, casi imperceptible y de difícil acceso. Muestra de ellos es el subsuelo del Peñón de Gibraltar, que guarda unas grandes instalaciones militares en estado de abandono llenas de misterio e historia.
Los exploradores del canal Aventuras Entresierras, aficionados y expertos en la materia, han desvelado en distintas investigaciones los secretos mejor guardados de la provincia, desde el mayor respeto y conservación del patrimonio.
En un reciente vídeo, en este caso sobre tierra, descubrían a sus seguidores cuatro cabañas abandonadas cerca de Tarifa que en otra vida podrían haber servido como alojamientos turísticos perfectamente equipados en plena naturaleza.
Meses atrás, también en el Campo de Gibraltar, el equipo se trasladaba hasta el Peñón para adentrarse en unos curiosos talleres susbterráneos para la reparación de vehículos militares, un refugio antiaéreo de la Segunda Guerra Mundial y unos depósitos de agua abandonados.
Durante la exploración en estos antiguos depósitos para aviones de la Real Fuerza Aérea en Gibraltar, recorrieron los antiguos pasillos de estas instalaciones desvelando a su paso un gran hallazo subterrénao con objetos de la época en su interior.
Estancias que sorprenden por su amplitud, donde se refugiaban los antiguos combatientes; pinturas enigmáticas en las paredes e incluso, casi al final de la exploración, reliquias como la pantalla de un radar antiguo:«Es algo muy extraño, esto es un tesoro», exclama con sorpresa el autor del canal. «¿Qué hace aquí? No me lo puedo creer».
Las estancias, en el interior del típico hangar abovedado, se encuentran a varios metros bajo el suelo y, como argumentan los exploradores, seguramente se construyó así para evitar que las personas que utilizasen este refugio resultasen dañadas por posibles desprendimientos de piedras.
Y esto no es lo único. Al final del vídeo también enseñan el hallazgo de cajas de municiones ya corroídas, cartuchos de calibre oxidados y un camión totalmente descompuesto. Una investigación que, una vez más, expone al público una porción del legado de Cádiz y nos ayuda a comprender en pequeña dosis uno de los acontecimientos más destacados de la historia de España.
