verano en cádiz
Vecinos y turistas lamentan el inicio de las obras en el entorno de La Caleta en pleno mes de agosto
urbanismo
El inicio de los trabajos para instalar las bandas de rodadura en Duque de Nájera obliga a limitar el paso en una de las zonas de mayor afluencia turística
El bello entorno de la playa de La Caleta de Cádiz ha perdido su encanto precisamente en uno de los momentos de mayor afluencia turística en la zona. El mirador al mar desde el Balneario de La Palma y los placenteros paseos por esta preciosa zona del litoral gaditano han pasado a estar dominados por decenas de vallas, rejas, cintas, arena y el desagradable ruido que provocan los obreros que han comenzado a trabajar este lunes en la zona.
El inicio de los trabajos para seguir con la instalación de las bandas de rodadura en la Avenida Duque de Nájera y dar así continuidad a todo el perímetro del casco histórico ha llegado en el peor momento, en pleno mes de agosto, cuando se cuentan por miles las personas que a diario recorren la zona para acceder a la playa de La Caleta, además de los habituales paseos de los miles de turistas que en estos días llenan las calles de la capital.
Una panorámica que nada tiene que ver con la belleza de este rincón, uno de los más visitados de la ciudad. Además, los vecinos y turistas que hoy pasaban por la zona, lamentaban las numerosas molestias a las que van a tener que hacer frente durante un período de cuatro meses, que es el plazo de ejecución con el que cuenta esta actuación.
Gran parte del acerado ha quedado reducido a lo mínimo y en otras zonas incluso han quedado cortadas al paso, por lo que no tienen otro remedio que ir sorteando los obstáculos que se van encontrando, entre el edificio del Mora y el de Valcárcel.
La ejecución de estos trabajos también ha provocado una nueva regulación del tráfico, al igual que con las fases anteriores. De este modo, en el tramo afectado por la obra está prevista la regulación alternativa de los dos sentidos del tráfico mediante semáforos de obra.
Desde el Consistorio se ha hecho un llamamiento tanto a los usuarios y usuarias de vehículos como a la ciudadanía de a pie, que sigan las indicaciones dadas, en cada momento, por los agentes de la Policía Local y por los responsables de la obra.
Con esta actuación, el Ayuntamiento daría casi por acabado el cambio del pavimento de toda la circunvalación del casco histórico, una obra que comenzó hace más de una década, cuando aún estaba en el Gobierno el Partido Popular y la alcaldesa Teófila Martínez. Unos trabajos que estuvieron rodeados de polémica ante la negativa de la Comisión de Patrimonio a autorizar el asfaltado total de la zona. Un pulso que finalmente se solventó con esta solución mixta, que permite mantener los adoquines de esta zona de la ciudad, con las bandas asfaltadas, reduciendo así el impacto que ocasiona el tráfico en toda la zona.
