Un aviso de la familia del supuesto agresor llevó a la Policía a descubrir el cadáver de la mujer en Sanlúcar

La adicción a la droga y la necesidad de tener dinero para soportar dicha dependencia podría ser una de las piezas que están detrás del supuesto crimen sucedido este pasado fin de semana en Sanlúcar de Barrameda. Allí, este domingo agentes de la Policía Nacional encontraban en su domicilio el cuerpo sin vida de una mujer de 59 años con evidentes signos de violencia.

Al poco tiempo los agentes detenían a un hombre de 39 años como único y principal sospechoso de los hechos acusado de haber provocado la muerte de esta vecina. Según ha podido saber este periódico, el hallazgo del cadáver se produjo cuando los policías fueron a la casa de la víctima situado en Cruz del Monaguillo, en el Barrio Alto de Sanlúcar, a ver si se encontraba bien. Al parecer habían recibido la alerta de la propia familia del supuesto agresor porque le habían notado «algo raro».

Y así, cuando los agentes pudieron entrar en la vivienda ya se encontraron tendida a esta mujer sin que pudieran hacer nada por salvarle la vida. Su cuerpo presentaba múltiples signos de haber sido golpeada. Marcas de asfixia pero también posibles contusiones en la cabeza y cortes en las manos, éstas últimas lesiones de haber intentado defenderse del ataque presumiblemente. Aunque será la autopsia que se le practique la que determinará las causas exactas de la muerte.

La relación que mantenía la víctima con el supuesto agresor era bastante cercana. Él le ayudaba con labores de la casa y cuidado y ella le daba alguna cantidad de dinero. Sin embargo, en alguna ocasión la fallecida le llegó a denunciar por amenazas.

El detenido pasará a disposición judicial este miércoles para ser oído en declaración. La autoridad judicial decidirá entonces y, también de acuerdo a las pruebas presentadas, si ingresa o no en prisión provisional.