Un coleccionista de cráneos se lanza a la caza y captura de una ‘gótica culona’ en ‘First Dates’
Esauel odia a la gente en general. Pero, contra todo pronóstico, hizo ‘match’ con Elena
Los comensales de ‘First Dates’ suelen cruzar la puerta del restaurante con un mix de nervios, expectativas e ilusión. Pero Esauel (23) ‘Little Sunchine’ fue la excepción. Este químico de laboratorio residente en Valencia se presentó al público como un tipo pesimista que odia la vida en general, y a la gente en particular. Y no tardó en poner en práctica su filosofía vital. Primero se puso a la defensiva con Lidia Torrent por confundir su nombre. «Quieres no ser tan pelota», le reprochó después a Matías . No le gustó que el camarero alabara su look.
Al respecto del decimonónico atuendo, explicó, «es la consecuencia de tener traumas infantiles, supongo porque no me acuerdo. La gente cambia y yo me estanco en cómo vivía Drácula».
También relató durante su presentación el paralelismo de su apodo con ‘Lucifer’. Todo lo que tiene que ver con el bien le aburre, así que prefiere alimentarse de las desgracias ajenas. «Aquí lo bonito es acabar bien, pero viendo a los demás, me gusta que acabe mal. Disfruto de las desgracias ajenas», confesó a Lidia Torrent , quien se sorprendió al verlo aparecer con un objeto un cráneo humano. «Colecciono estas cosas. Sí, estoy fatal. Es como como la joya de la corona para mí que hago taxidermia y colecciono huesos. Tengo un congelador lleno de cadáveres de animales donados por gente a la que se le ha muerto, tiendas de animales…».
Una compañera perfecta
En lo relativo al amor, Esauel también es de ideas fijas. «Me gustan las góticas culonas. Y sin son pelirrojas, mejor», anunció. La definición de la chica ideal del valenciano parecía encajar perfectamente con su cita, Elena (19), estudiando en la Escuela de Cine de Ciudad Real. «Es una gótica culona, qué más puedo pedir en esta vida», manifestó el soltero al conocer a una persona de mente tan abierta como él. «Me gustan los chicos pálidos, que parezcan que están muertos», desveló la joven ciudadrealeña. Es por eso que no solo no salió corriendo al ver la calavera de Esauel , sino que acabó revelando que ella es más de chicos oscuros que de rollo romántico.
De hecho, durante la cena le comentó a su cita que el sitio más raro dónde había practicado sexo era un cementerio.
Más adelante, ‘Little Sunshine’ le habló sobre sus aficiones. «Colecciono cráneos, mi habitación es como la mazmorra del conde Drácula… Tengo una pitón, te lo digo en serio, no estoy hablando de mi pene». A pesar de sentir buen rollo entre ellos, Elena asumió que «si salgo con este tío voy a estar tres años en terapia».
No obstante, tras gastarle una broma fingiendo que no quería seguir conociéndole, aceptó tener una nueva cita. Contra todo pronóstico, ‘Little Sunchine’ también tuvo que admitir que se lo había pasado muy bien, confirmando que habría segundo encuentro entre la pareja.
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