Elegidos para la gloria, en Disney+

Michael López Alegría: «Para ser astronauta ya no hace falta ser un superhombre»

El primer hombre de origen español que viajó al espacio ha recordado su experiencia a raíz del estreno de la serie «Elegidos para la gloria», que recuerda el periplo de los siete magníficos del programa Mercury

Michael López Alegria, durante su misión ABC
Helena Cortés

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Mientras esperan la llegada de los superhéroes de Marvel, Disney+ se centra en la aventura de otros superhombres, los primeros astronautas estadounidenses que, en plena Guerra Fría y en un tiempo récord, lograron llegar al espacio e ilusionar a todo un país. «Elegidos para la gloria», que se estrena este viernes, repasa el nacimiento del programa Mercury, que recluta y prepara a solo siete astronautas elegidos de entre los mejores pilotos del ejército. Tras su presentación, los siete, liderados por John Glenn (Patrick J. Adams) y Alan Shepard (Jake McDorman), se convierten en celebridades en cuestión de días demostrando cómo gente normal puede lograr a hacer cosas extraordinarias, como descubrir un nuevo mundo (espacial).

«Alguna interacción tuve con ellos, venían a Houston a visitarnos en algunos eventos especiales. Para mí eran héroes, era un orgullo solo darles la mano», reconoce Michael López Alegría , el primer astronauta de origen español que ha estado en el espacio en una charla con motivo del estreno de la serie basada en la novela de Tom Wolfe. « Esa gente fueron pioneros de verdad , todos empezaban de cero. Montar en un cohete que nunca ha volado no es igual que montar en una cápsula que ha volado cien veces, somos distintos. Ya está un poco establecido el camino, en esos momentos eran como los que descubrieron América», añade.

En «Elegidos para la gloria» se puede ver las pruebas imposibles a las que sometían a estos futuros astronautas. «En mi época eran bastante más suaves que en la serie, ya sabíamos por ejemplo que se podía comer en el espacio, cosas que entonces no se sabían. Ahora no hay que ser superhéroes ni atletas. Sí hay que tener una buena forma física, porque la NASA hace una inversión importante de muchos años en los astronautas Ahora hay pruebas médicas y también psicológicas, para demostrar la adaptación a ciertas tareas», recuerda. «Es cierto que sigue siendo muy difícil y muy competitivo, en la última convocatoria hubo 18.000 solicitudes, aunque ahora ha cambiado ese entrenaniento. En la época de los Mercury no sabían qué necesitaban y eran misiones muy técnicas, el objetivo era llegar y volver rápido. Ahora hay un componente científico y de experimentación más grande. No solo viajan pilotos, también médicos, científicos, especialistas... Se ha ido abriendo el campo según lo que hace falta», cuenta Íñigo Muñoz Elorza, astronauta análogo y ex-instructor de astronautas en el Centro Europeo de Astronautas (ESA EAC) en Colonia.

Los siete magníficos del Mercury, como se ve en la serie, tenían además una fuerte ambición exploradora, eran competitivos y «bravos». «En ese momento se valoraba eso, ahora es todo lo contrario, sigue existiendo esa vocación por llegar el primero pero se valora el trabajo en equipo », subraya el astronauta nacido en España, que reconoce que no hay palabras para explicar lo que se siente cuando no hay gravedad y ves imágenes inéditas de la Tierra.

La importancia de la publicidad

John Glenn, uno de los líderes de la misión, que más tarde llegó a ser senador, era uno de los más concienciados con la importancia de la misión. De hecho, en muchas ocasiones se habla de la misión Mercury como el primer reality show. En plena Guerra Fría, convertirse en estrellas les permitía seguir recibiendo financiación. «La misión Mercury era como una startup, tenían que demostrar que merecía la pena invertir, tenían que convencer al público . En España, ahora que tenemos un ministro astronauta, sí estamos más cerca de las misiones espaciales, aunque lo normal es que haya más pressencia en los medios después de una misión. Ahora con las redes sociales los astronautas mandan fotos desde el espacio y mucha gente los sigue. Aún así, la ESA esmucho menos conocida que la Nasa, que tiene hasta camisetas», relata Muñoz Elorza. «Recuerdo que en los noventa, cuando fui el primer astronauta de origen español en viajar al espacio, la gente incluso me reconocía por la calle. Pero eso ya pasó, y no está tan mal», bromea López Alegría.

La próxima gran conquista, coinciden los expertos, será llegar a Marte. «Siempre se habla de veinte años, pero según avanza el tiempo esa cifra no se reduce», admite J. Miguel Mas Hesse, astrofísico del Centro de Astrobiología (CSIC-INTA Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial) y moderador del coloquio. «Estamos más próximos que nunca, a nivel mundial esto son actividades coordinadas de agnecias espaciales de todo el mundo. La idea es volver a la Luna y usar una base allí como trampolín. Yo creo que a finales de los años treinta o cuarenta podría estar. En el campo espacial trabajamos en décadas, no manejamos los tiempos del Mercury», puntualiza este experto, que cree que es bueno que los jóvenes vean la serie para que, entre tanta película de ciencia ficción, bajen a la Tierra y vean el mérito que tiene conseguir comenzar la conquista del espacio.

En 2024, además, l a Nasa tiene la intención de llevar a la primera mujer a la Luna. Tal y como relatan, el porcentaje de mujeres en los cuerpos de astronauta está actualmente en torno al 25 o 30%.

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