Sale a la luz el verdadero culpable del mayor gazapo en la historia de «Juego de Tronos»

Ni siquiera la daga con la que Arya Stark mató al Rey de la Noche generó tantos comentarios. El vaso de starbucks que la Madre de Dragones tenía en su mesa mientras se celebraba en Invernalia el triunfo contra los muertos fue, sin duda, el gran protagonista del cuarto capítulo de «Juego de Tronos» , la ficción más popular y, tras la última temporada, también la más polémica de HBO. Poco se habló de la muerte de Missandey en comparación con el recipiente, un gazapo imperdonable en una serie de televisión de semejante presupuesto y despliegue técnico.

Aunque no es la primera vez que se cuela una bebida en la serie, no olvidemos el vaso de café que Nikolaj Coster-Walday (Jaime Lannister) sostenía en la mano en su mano supuestamente amputada en la cuarta temporada, sí es el fallo más sonado de «Juego de Tronos». Sin embargo, a pesar de ser mencionado como «el vaso del Starbucks» , el recipiente que aparece junto a Emilia Clarke no pertenecía a la multinacional ni su logo era una sirena, sino que era de una cafetería de la localidad de Bainbridge, tal y como reconoció el director artístico de la ficción, Hauke Richter.

En su momento, todas las miradas se dirigieron a la propia actriz que dio vida a Daenerys Targaryen por el gazapo , que incluso asumió la culpa a través de una foto en su Instagram. Sin embargo, tal y como ha revelado la propia Clarke tras su paso por «The Tonight Show with Jimmy Fallon», no fue ella la verdadera culpable.

Resulta que el responsable del fallo más recordado de «Juego de Tronos», que hasta ahora ha permanecido en silencio, fue otro miembro del reparto de la serie más premiada en la historia de los Emmy.

«Hace poco tuvimos una fiesta antes de los Emmy, y Conleth (Hill), que interpretó a Varys, y que está sentado a mi lado en esa escena, me llevó a un lado y me dijo: "Emilia, tengo que decirte algo. Tengo que decirte algo, bonita. ¡El vaso de café era mío" . ¡Era suya!», descubrió entre risas Clarke al humorista Jimmy Fallon.

Normal que Conleth Hill se lo hubiera callado, una venganza en toda regla al destino que corrió su personaje , el consejero de los rumores, en «Juego de Tronos», todo por culpa del giro tiránic de la reina Targaryen.