Yago

Amigos desde niños, Omar, Abel y Lucio se quieren como hermanos a pesar de ser muy diferentes. El talento y la suerte de Omar provocan la envidia de Lucio, quien no soporta perder siempre ante su amigo y guarda un intenso deseo de desquitarse de él, mientras que Abel prefiere siempre tomar el camino fácil y unirse con el que más le conviene. Cuando Sara llega a vivir al barrio, Omar se enamora perdidamente, pero ella es una estafadora manejada por su padre, un hombre vil que la chantajea para que se aproveche de Omar y así puedan consumar el robo a un casino. Cuando Lucio se entera, decide ayudarlos y arrastra con él a Abel. Lucio es el cerebro, Abel el ejecutor y Sara el anzuelo en la traición a Omar.