Aunque el viaje a Guatemala aún no es seguro, la tía de Irene acepta quedarse con ella en caso de que dicho viaje se lleve a cabo. Por su parte, Bibiana, con la excusa de que necesita efectivo para obras de caridad, consigue sacarle más dinero a Eulalia.
El agobio de Andrés por todos los problemas monetarios y los que le causa Juan Carlos sigue en aumento. Por su parte, Eulalia intercepta una carta de Juan Carlos para Almudena. Horrorizada, se lo cuenta a Matías y siente que su familia es víctima de una conspiración.
Matías vuelve a acercarse a Eulalia a través de las aficiones compartidas, dato que no escapa a Adelina. Por su parte, Chelo sigue muy afectada por lo sucedido con don Vicente y Adelina trata de convencerla para que deje de sentirse mal.
Jaime está inmerso en sus jornadas poéticas mientras pasea con Asunción y piensa en Irene. Por su parte, Marcelino sigue con sus tribulaciones y está a punto de meter la pata. Pelayo le insta a confesar la verdad antes de que la situación alcance niveles de tragedia.
Steven regala a Manolita las fotos que hizo a sus hijas y parece que retiene con interés el comentario de Pelayo ante la foto de Joachim. Por su parte, un empresario ha citado a Adelina para hablar de una nueva revista.
Se ha confirmado que Marisol está sorda. Pese a ello Manolita y Marcelino, que cuentan con el apoyo decidido de Pelayo, prometen que no se rendirán. Amalia ha comenzado a imponer reglas en casa de los Hernández Salvatierra, y eso a Almudena no le está gustando nada.
Fede y Jaime han de defender ante el Rector las jornadas poéticas por culpa de los incidentes sucedidos en el primer recital. Por su parte, Manolita está muy preocupada por Marcelino, quien sigue sin decir la verdad.
Adelina, víctima de la encerrona preparada por Joachim, descubre en la cama a éste con Benita. Encolerizada, toma medidas drásticas contra ambos. Por su parte, Chelo se encuentra con un gran comité familiar de bienvenida.
Almudena no tiene más que miedos y dudas con respecto a lo sucedido y a su propio futuro. Jaime y Andrés intentan animarla. Por su parte, Adelina no soporta a Joachim y le exige a Matías que lo aparte definitivamente de su lado.
Andrés, muy inquieto después la misteriosa llamada recibida en plena madrugada, sigue temiendo que les pueda pasar algo tras la muerte de Juan Carlos. Matías, siempre eficiente y discreto, se encarga de arreglarlo.
Pilar pide a Irene que le ayude a hacer justicia con Carreño, ya que las posibilidades de que sea juzgado y castigado son nulas. Por su parte, Luci acude a la casa de Adelina para que le practiquen el aborto.
Chelo sigue manteniendo la farsa de que está trabajando en una revista, pero don Santos descubre la verdad y sus padres le piden explicaciones. Y don Gonzalo recomienda a Andrés que Eulalia guarde mucho reposo: si no descansa, su estado puede llegar a ser irreversible.
Almudena comienza a tener sospechas sobre lo que le ha podido pasar a Juan Carlos, así que empieza a hacer averiguaciones y acaba descubriendo lo sucedido. Mientras tanto, en casa de Adelina se vive la tensión provocada por la operación de Luci.
La llegada de Anita y Jorge ha afectado mucho a Ubaldo y ha despertado en él antiguos recuerdos de su niñez. Por su parte, Asun vive con nerviosismo la prueba que hará al día siguiente para el puesto de mecanógrafa en la fábrica de Andrés.
Ubaldo queda fuertemente impactado por el descubrimiento de que Joachim es Johann Lemper, el médico esterilizó a Irene, y no sabe si debe o no decírselo. Paralelamente, hoy es el día que Miguel va a entrar en casa de sus futuros suegros y toda la familia le da consejos.
Ubaldo padece mucho con la brusquedad en el carácter de su padre y le explica a Irene diferentes momentos de su niñez y de la relación con su madre. Por su parte, Adelina sigue resentida con Goyo por el comentario que hizo acerca de Richi y se muestra hosca con él.
Jaime e Irene viven un momento de acercamiento intenso, que no pasa desapercibido para Andrés, cada vez más convencido de que entre Irene y su hijo ocurre algo. Por su parte, la aparición de Chelo altera la vida de la familia.
Aunque Amalia hace todo lo posible para congraciarse con Andrés, Almudena sigue sin congeniar con su nueva profesora. Mientras, la noticia de que Miguel intercedió para que su hermana consiguiera el puesto de trabajo los acerca a ambos.
La ausencia de Almudena aumenta la melancolía y tristeza de Eulalia. Andrés le promete que verá a la niña en cuanto esté un poco mejor. Por su parte, Chelo entra a trabajar en el bar y trae con ella un nuevo aire al Asturiano.
Tras pasar la noche en el calabozo, Basilio es liberado y Felisa respira aliviada. Almudena responsabiliza a su padre de que Juan Carlos haya ido a parar a la cárcel. Mientras, Chelo pide a Trino que intente convencer a su madre para que la deje ir de gira.
Irene busca una excusa para justificar su ausencia ante Ubaldo y no tener que ir a la tienda. Hoy es el día señalado para poner en pie el plan de Pilar. Por su parte, Juan Carlos amenaza con tirar de la manta si Andrés no le visita en prisión.
Bibiana se entera de la historia que hubo entre Adelina y Andrés y comienza a maniobrar para generar confusión en la familia. Mientras, Irene cuenta sus recuerdos a Steven, algunos de ellos muy traumáticos, y éste le hace ver que ha confundido realidad con ficción.
La tensión vivida en los últimos tiempos parece haber llevado a Joachim a tomar una decisión muy drástica. Esto provoca conmoción en la Plaza de los Frutos y en casa de Adelina y Benita al conocer la noticia. Por su parte, Chelo y Fina acaban peleadas.
Javier va a ver a Irene porque no sabe nada de Pilar. Ubaldo escucha la conversación y después de comprobar que Irene no está en la tienda, como le dijo, decide intervenir. Mientras, Marcelino hace planes totalmente absurdos para cuando se queden sin piso.
Todo va bien en la merienda hasta que Ubaldo sufre un desvanecimiento. Por otro lado, Almudena tiene un primer encuentro con Adelina. Finalmente, Trino ya tiene fecha para el examen de conducir. El problema es que no tiene coche con el que hacer las prácticas.
Benita y Joachim limpian escrupulosamente toda la casa para eliminar cualquier huella de Luci y esperan con impaciencia el regreso de Adelina. Por su parte, Asunción se da cuenta de la buena sintonía entre Miguel y Fina.
Steven alecciona a Sancho sobre lo ocurrido en los campos de concentración nazis y orienta la investigación sobre Joachim. Miguel riñe a Chelo por dejarse hacer fotos. Se evidencia lo cambiada que ha vueltoChelo de la gira y la distancia que la separa de su familia.
Ubaldo se despide de Adelina regalándole unos discos. Ella le anima a impartir una clase y acaban bailando los dos. Por su parte, Benita imita la letra de su hermana en la carta que escribe a Gloria haciéndose pasar por Adelina, pero la rompe.
Andrés sigue inquieto ante la falta de noticias de Ubaldo e Irene, y aprovechando una visita de Manolita para llevar comida se presenta en su casa. Por su parte, la relación de Adelina y Almudena se estrecha y esto tiene muy inquieta a Eulalia.
Un examen imprevisto impide que Fede pueda ir al cine con Almudena y Jaime. Ella cree que es porque se avergüenza de ir con una tullida. Por su parte, Irene soporta, aterrorizada, las barbaridades de Carreño y debe arreglarse para acudir a la cita que él le impone.
Es el primer día de trabajo de Asunción en el despacho de Andrés. Miguel la acompaña, apoya y vigila en todo lo que puede. Por su parte, don Santos aún concibe esperanzas de que su compromiso con Chelo no se haya roto definitivamente.
La decepción de Almudena por no poder salir con Jaime y Fede tal como había planeado la sume en un estado depresivo. Gracias a la ayuda de Benita, Joachim sale airoso del interrogatorio policial. Benita le obliga a pagar de un modo muy especial el favor que le ha hecho.
Irene se ha encontrado el cadáver de Carreño y huye despavorida. Tras una noche sin poder dormir le cuenta a Ubaldo lo que ha ocurrido. Benita, por su parte, confiesa su pasado a Joaquín y cuanto odia a su hermana por sus continuas humillaciones.
La trágica y repentina muerte de Joachim ha dejado muchos cabos sueltos, entre otros dónde y cómo será enterrado. Benita vive el duelo por su fallecimiento como lo haría una auténtica viuda, lo que molesta mucho a Adelina, que cada día está más irritable con su hermana.
Ubaldo propicia un encuentro con Jaime y éste, sospechando que hay algo en la enfermedad de Ubaldo que no le cuentan, se informa. Por su parte, Basilio mete la pata en el bar hablando más de la cuenta. Ahora teme que hayan descubierto que ya no es mutilado de guerra.
Las ilusiones de Irene con su nuevo trabajo se van al traste porque el anciano al que debía cuidar trató de abusar de ella. Cuando Ubaldo la consuela se da cuenta de que no lleva el brazalete que él le regaló.
Bibiana, cuyo encuentro con Eulalia ha estado cuidadosamente preparado, ha trazado un plan para hacerse con la voluntad de la mujer. Mientras, el asunto del abuelo provisionalmente instalado en casa de Marcelino se complica.
Hay indicios de que la muerte de Joachim no fue un suicidio. Steven tiene su propia teoría sobre lo sucedido. Mientras Trino progresa en sus estudios por correspondencia y está más que contento por ello, Pedrito no quiere ir a la escuela bajo ningún concepto.
Miguel acompaña, a regañadientes, a su madre a la iglesia para pedirle a Dios que no le suceda nada a su hermana Chelo durante la gira. Por su parte, Andrés se encoleriza cuando Matías le explica los intentos de extorsión de Juan Carlos.
Don Gonzalo trata a Eulalia, que está cada vez peor de su depresión, y recrimina a Andrés y Jaime su actitud hacia ella. Por su parte, Marcelino y Pelayo se preguntan sobre el entierro de Joachim y optan por ser discretos.
Bibiana consigue tranquilizar a Almudena y se gana la confianza de Eulalia, aunque Andrés resulta más difícil de convencer. Por su parte, Marcelino se propone realizar una fiesta en El Asturiano para celebrar que el asunto del alquiler del piso se ha cerrado.
Pelayo sufre pesadillas: teme perder el bar por no poder pagar la hipoteca. Por su parte, Matías descubre que algo le ha sucedido a Adelina tras ver en su rostro el resultado de la discusión que mantuvo con su marido.
La noticia de cuál era la verdadera personalidad de Joachim ocasiona un gran impacto en Adelina y Benita. Adelina arremete contra Andrés, al que acusa de haberla engañado. Una entrevista en la prensa y las emociones de los últimos días provocan un desplome de Adelina.
Ubaldo se siente obligado a dar explicaciones a Steven sobre su relación con Richi. Le habla de su matrimonio con Irene, de lo que significa ser homosexual en España y afirma que quiere tanto a su mujer que haría lo que fuese por ella.
La entrevista con Adelina aparece en portada en la revista "Sucesos", pero pronto es retirada de los quioscos por orden gubernativa. En El Asturiano se habla de la censura y de cómo el Estado oculta las noticias que no le favorecen.
Pelayo desahoga ante Mauricio lo que de verdad le sucede. Joachim está cada vez más nervioso, y Steven, por su parte, va estrechando su cerco. Mientras, Matias va a visitar a Joachim para exigirle que deje de cometer estupideces.
Andrés está cada vez más preocupado al ver el estado de Eulalia y quiere imponer medidas drásticas. Por su parte, Asunción vuelve a tener problemas con Lupe y comienza a pensar en la idea de dejar la costura para emprender algo que la llene más.
Se descubre el embarazo de Chelo y esto provoca una seria reacción de sus padres. Mientras, Steven se encuentra con Adelina en el café del teatro y le confiesa que él es quien descubrió la verdad sobre Joachim.
Trino y Felisa están cada vez más agobiados: el embarazo de Chelo supone un jornal menos y una boca más que alimentar. Por su parte, Matías ha estado estudiando la posibilidad de llevar a Eulalia a una casa de reposo para que se reponga.
Andrés y Jaime discuten con dureza, llegando casi a la manos. Jaime decide irse para evitarlo. Por su parte, Almudena, tras haber visto el artículo sobre Juan Carlos, considera a su padre culpable de todo. Además, Trino comunica a Andrés que pronto obtendrá el carné.
Trino acepta la proposición de don Santos y se hace cargo del reparto de la leche. Las cosas no salen demasiado bien el primer día y Trino le hace un nuevo rasguño a la camioneta. Además Chelo no se siente digna se ser la madrina de Marisol y prefiere renunciar.
Han pasado dos meses. En este lapso de tiempo, Bibiana ha reafirmado su presencia en casa de los Hernández Salvatierra y ha conseguido que tanto Eulalia como Almudena confíen ciegamente en ella. Irene y Asunción, sin embargo, aún no la ven con buenos ojos.
Felisa oculta lo sucedido la noche anterior y cubre a Chelo frente a Trino. Chelo no parece muy alegre y busca refugio en Joachim. Mientras, Benita anuncia que ha acabado las gestiones de venta de la finca y regresa a Madrid.
Trino y Felisa se felicitan por el éxito de Chelo, pero la alegría de Trino dura poco ya que Marcelino y él discuten sobre quién tiene la culpa de haber perdido la quiniela premiada. Por su parte, Andrés escucha accidentalmente una conversación de Bibiana con Almudena.
Don Santos le pide matrimonio a Chelo, pero ésta, sorprendida por la propuesta, no sabe qué decir. Ubaldo, por su parte, sospecha que puede haber química entre el americano y su mujer y hace todo lo posible por acercarlos.
Tras el emotivo encuentro que han vivido en la pensión, Jaime no quiere volver a su casa. Sin darse cuenta de que Andrés le ha tendido una trampa, Irene regresa a la pensión para avisar a Jaime de que su padre le está buscando.
Jaime descubre, alarmado, la influencia que Bibiana ejerce sobre Eulalia y su hermana. Asunción se siente dolida al descubrir que Jaime ha vuelto a casa, pero no ha intentado ponerse en contacto con ella. Por su parte, Adelina se interesa por el estado de Almudena.
Chelo confiesa a su hermana que don Santos le ha propuesto matrimonio. Asunción, escandalizada, trata de impedir que acepte. Además, la mujer alquila una máquina de escribir y se dispone a practicar sin tregua porque aspira a entrar a trabajar en un despacho.
Eulalia da dinero en secreto a Matías para que pague a Adelina. Irene tiene mala conciencia con Asunción y decide no volver a verse con Jaime. Mientras, don Santos se muestra cada vez más obsequioso con Chelo, que empieza a sentirse agobiada.
Ubaldo se encuentra con Jaime y procura sonsacarle el motivo de su distanciamiento, pero no lo consigue porque Jaime se refugia en Asunción. Paralelamente, la entrevista que Andrés le ha pedido a Irene es para hablar de Bibiana.
La artista Estela del Val reaparece en el Teatro Cervantes de Madrid con una exitosa producción. Si embargo, el estreno se ve eclipsado por la muerte en plena escena de Marcos de la Vega, marido de Estela, además de protagonista y director de la obra.
La sexta tanda del serial de época se estrena marcada por un aluvión de nuevos personajes. Tras el éxito de la temporada anterior, que alcanzó una media de casi tres millones de espectadores, la Plaza de los Frutos será testigo de nuevas intrigas y romances.
Irene comenta con Ubaldo su encuentro con Andrés, aunque omite algunas confidencias que Andrés le hizo sobre su matrimonio con Eulalia. Mientras, la estrategia orquestada por todos para reconciliar a Trino y a Marcelino da resultado y los dos resuelven sus diferencias.
Asunción, terriblemente impactada por el descubrimiento de la carta de Jaime a Irene, se encuentra con ésta y no es capaz de hablarle. Por su parte, los Hernández Salvatierra hacen guardia en torno a Eulalia para evitar que vuelva a intentar acabar con su vida.
Bibiana, deseosa de consolidar su poder sobre Eulalia, exagera la dosis de estramonio que ha suministrado a Almudena y la muchacha sufre intensas convulsiones. Manolita está de parto mientras Felisa y Marcelino se pasan el tiempo de espera discutiendo.
Jaime acaba aceptando la invitación de Ubaldo para ir a cenar a su casa con Asunción. Cuando lo comunica a su padre, éste le da un encargo para la Academia. Una vez allí, Adelina le propone pasar un rato con una muchacha, que quiere conocerlo, pero Jaime lo rechaza.
Almudena se niega a colocarse el aparato ortopédico, pero Eulalia y especialmente Bibiana la convencen incluso de salir a la calle con él. Paralelamente, Bibiana predice a Andrés que la reunión de hoy le saldrá muy bien y efectivamente así es.
Andrés llega inesperadamente a casa de Adelina para desahogarse porqué tiene demasiados problemas en casa. Mientras tanto, Leonor percibe la decepción de Marcelino por haber tenido otra niña y Jaime no tiene tiempo de hablar con Asunción.
Adelina se encuentra a Joachim y Benita en la academia y humilla a Benita delante de los bailarines. Mientras, Bibiana se dispone a realizar el ritual para expulsar al diablo del cuerpo de Almudena y de la casa. Sus ritos tienen un final muy estruendoso y espectacular.
Jaime se desahoga con Irene y le manifiesta sus dudas respecto a lo que siente por Asunción. Irene le advierte que no confunda amor con compasión. Por su parte, Adelina trata con dureza a Goyo, pero le pilla hablando muy bien de ella.
Miguel y Jaime hacen las paces casi al mismo tiempo que Andrés visita a Trino y le comunica que no habrá represalias por la pelea. Llega Gloria para celebrar las Navidades con su familia y Adelina oculta la realidad de su relación con Joachim.
La cena de Nochebuena para los del Asturiano parece que va a ser un desastre porque ni Marcelino ni Pelayo han hecho lo que les encargó Manolita. Por su parte, Eulalia y Andrés acercan posiciones y viven unas fiestas marcadas por las buenas acciones.
Eulalia parece haberse acercado a Andrés. Este hecho sumado a un encuentro con Matías hace que algo se mueva en su interior y aclare las cosas con Asunción. Jaime, sumido en un mar de dudas, acaba besándose de nuevo con Asunción, quien da la cara por él ante Miguel.
Andrés y Eulalia tienen posiciones contrapuestas respecto a Marina, pero Eulalia mantiene su decisión de echarla de casa. Jaime, descolocado por la confesión de Ubaldo acerca de su enfermedad, aún se inquieta más cuando éste le pide que proteja y cuide de Irene.
Irene y Asunción están muy preocupadas por el estado de Almudena. Andrés sigue sin confiar en el médico que ha traído Bibiana para atender a su hija. Por su parte, Manolita regresa a la Plaza de los Frutos con su hija para gran alegría de la familia y de sus amigos.
Bibiana se muestra amable con Jaime para sonsacarle información y mete prisa a Eulalia para que pague la cuenta del doctor que ella misma ha llevado. Por su parte, Jaime no puede apartar el pensamiento de Irene y decide hablar con ella una vez más.
Irene, muy impactada tras ver a Carreño y Pilar, necesita reponerse. Mientras tanto, le cuenta a Ubaldo lo sucedido cuando fue evacuada de Madrid. Por su parte, Jaime le explica a su hermana la formalización de sus relaciones con Asunción.
Miguel descubre que Asun abofeteó a Fina porque insultó a Chelo. Irene pide perdón a Asun por lo ocurrido entre Jaime y ella, pero Asun no admite sus disculpas. Por su parte, Don Santos sigue a la espera de que Trino le confirme si autoriza su relación con Chelo.
Bibiana e Irene se enfrentan por fin cara a cara, pero Bibiana gana el encuentro porqué tiene información comprometida. Por su parte, Fede recibe datos nuevos sobre Celso y, junto con Asunción, movilizan a Jaime para investigar sobre Bibiana.
Jaime, que aún no ha asimilado la ruptura con Irene y todo lo que le dijo sobre Ubaldo, tiene un encuentro con Steven que ayuda a abrirle la mente respecto a ciertas cosas. Mientras, Almudena quiere que se reanuden las clases y Eulalia se lo pide a Irene y Asunción.
Jaime se reencuentra con Fede después de algún tiempo sin verse. Los dos hablan de los cambios que se están produciendo en la universidad. Por su parte, Basilio y Pelayo tienen un rifirrafe por culpa de sus ideas políticas.
Andrés regresa a casa tras haber dejado a Eulalia en la residencia mientras Jaime se prepara para irse al campamento militar. Andrés se plantea buscar soluciones, una vez se ha quedado solo. Almudena necesitará compañía y ayuda en los estudios para no perder el curso.
Joachim se interesa cada vez más por las propiedades de Benita en el pueblo y decide ser más amable con ella. Irene, asustada por las amenazas de Bibiana, aconseja a Asunción ser más prudentes, pues teme que puedan perder el acceso a Almudena.
Andrés decide esperar para actuar contra Bibiana y, mientras tanto, recaba más información y más pruebas. Por su parte, Asunción sospecha que Jaime ha iniciado relaciones con una compañera de facultad e Irene tiene que disimular.
Tras el susto inicial, la salud de Marisol parece estar bajo control ya que se descubre finalmente el motivo de su llanto. Por su parte, Benita comienza a realizar movimientos extraños que parecen responder a algún tipo de plan.
Andrés descubre el escrito de Jaime para la asamblea de estudiantes en los que se habla de la reconciliación entre las dos Españas y se burla de él. Por su parte, Trino, descubre a Felisa hablando con un desconocido y se da cuenta de que es más celoso de lo que creía.
Andrés es el siguiente objetivo de Bibiana. Pese a los recelos de Celso, Bibiana cree que si le ofrece algo puede sacarle mucho dinero. Por su parte, Jaime ha encontrado información sobre el estramonio y da cuenta de ello a su padre.
Marcelino y Manolita van a ver el piso nuevo y regresan encantados. Ha salido un posible inquilino para su actual casa, pero quiere contrato. Por su parte, Almudena sigue en una nube y se hace ilusiones con el noviazgo de Jaime con Asunción.
Adelina descubre que Joachim ha robado a Benita y que ambos han estado conspirando a sus espaldas. Por su parte, Chelo confiesa a Adelina que está embarazada y necesita ayuda de su marido, pero Adelina le aconseja decir la verdad en casa.
Forzado por la insistencia de su mujer, Trino decide hablar con don Santos, aunque no las tiene todas consigo. Por su parte, Matías toma nota de la apatía de Andrés y le reprocha que, desde que se marchó a la casa de reposo, no se haya interesado por Eulalia.
La noticia del inicio del juicio a Restituto aparecida en los periódicos remueve los ánimos y reaviva antiguos miedos en Trino y su familia. Por su parte, Eulalia pide ayuda a Matías para localizar al padre del niño que espera Marina.
Adelina comparte con Matías la preocupación por su futuro e intenta sonsacarle alguna información sobre sus sentimientos, pero Matías se resiste a responder. Mientras, Jaime acompaña a casa a su padre, que ha ahogado la depresión en el alcohol.
El esperado desenlace del especial protagonizado por Cayetana Guillén Cuervo y Juanjo Puigcorbé desvelará la identidad del asesino. Estela del Val se encuentra detenida, acusada de haber matado a su marido, aunque Héctor y Bonilla están convencidos de su inocencia.
Marcelino se compromete a cancelar el acuerdo con el posible inquilino si quiere un contrato legal. A pesar de que asegura que lo ha hecho, Pelayo descubre que no es cierto. Por su parte, Trino, muerto de celos, sale detrás de Felisa con un destornillador.
Andrés, con la ayuda de Jaime, pone en marcha su plan para desenmascarar a Bibiana de manera que pueda denunciarla. Mientras, el estado catatónico de Benita exaspera a Adelina hasta que empieza a creer que está enferma.
Andrés sigue conversando con Bibiana y alabando su labor filantrópica, pero la verdad es que le ha tendido una trampa. Matías trata de impedir que Eulalia regrese a casa para dar tiempo a Andrés y Jaime a finalizar su plan.
Benita está angustiada porque sigue durmiéndose por las noches. Cuando se está disculpando a Joachim, Adelina le pilla y teme que ambos estén conspirando contra ella. Por su parte, Manolita está asustada por tener que testificar en el juicio a Restituto.
Almudena está dispuesta a esforzarse para salvar el curso examinándose en septiembre, pero no comprende que no pueda dar clases con Irene. Por su parte, Matías insta a Jaime y Almudena a que obliguen a su padre a visitar a Eulalia.
Eulalia se muestra en paz con su familia, ignorante de la tormenta que se avecina. Mientras, Bibiana se despide de su marido convencida de que el golpe que le ha propuesto a Andrés va a ser la culminación de su carrera delictiva.
Andrés tiene la entrevista en el Ministerio y cree que su futuro mejorará, pero Juan Carlos, que ya se ha enterado de que ha habido un cambio de juez, amenaza con tirar de la manta e incriminarlo. Por su parte, Manolita va a declarar, por fin, en el juicio de Restituto.
El edificio que construye Andrés parece superar satisfactoriamente las pruebas de carga, hasta que Matías le comunica que ha sucedido una catástrofe. Por su parte, Marcelino firma el contrato de arrendamiento para el piso en el que viven.
Marcelino, desesperado por el derrumbamiento de su nuevo piso, no ve el momento de confesar a Manolita que ha alquilado el piso en el que viven. Andrés, muy nervioso por lo sucedido, cree que es víctima de una conspiración para aniquilarlo política y profesionalmente.
Adelina sale esa noche a un estreno y allí conoce a Steven. Benita aprovecha su ausencia para estar con Joachim. Por su parte, Bibiana sigue con su estrategia envolvente con Andrés y le entrega un amuleto que éste regala a Trino.
Eulalia recibe la visita de toda la familia. Andrés se siente muy incómodo en compañía de su mujer y no sabe disimularlo. Por su parte, don Santos y Chelo tienen su primer encuentro desde que se prometieron.
Es el día de Nochevieja y Andrés se atrinchera en casa con intención de eludir a la prensa y organizar la estrategia que le librará de responsabilidades. Mientras, la angustia hace mella en Marcelino, que sigue ocultando a Manolita que ha puesto el piso en alquiler.
Benita sigue convaleciente tras la intoxicación que le produjo la sobredosis de somnífero que le administró Joachim, y éste se siente cada vez más agobiado. Por su parte, Irene sigue animando a Ubaldo a emprender el viaje a Guatemala.
Asun sigue muy dolida, pero deja a un lado sus sentimientos para ofrecerle a Irene la amistad y el apoyo que en estos momentos necesita. Por su parte, Miguel pide a Jaime que ayude a Asun a conseguir un empleo como mecanógrafa en la fábrica.
Steven está instalado en el barrio y no deja de hacer fotos, aparentemente maravillado por sus gentes y costumbres. Mientras, la noticia de la condena de Restituto produce un gran impacto en El Asturiano, donde se debate a fondo sobre la pena de muerte.
Ubaldo, tras la cena de Fin de Año, se ofrece para acompañar a Pilar a la pensión en la que hospeda. Allí descubre, con sorpresa, que parece tener un marido, Javier, de quien no ha hablado. Habla con Irene y le manifiesta su sospecha de que Pilar esconde un secreto.
Andrés recibe las notas de Jaime, más bajas que el año anterior. Como Almudena tampoco se toma en serio sus estudios, Andrés toma una decisión drástica. Mientras, se acrecienta la amistad entre Matías y Eulalia durante una visita de este al sanatorio.
La detención de Bibiana provoca una fuerte crisis nerviosa en Eulalia, a la que don Gonzalo tiene que sedar. El médico se queja a Andrés de que lo hayan apartado de Almudena, porque por esta razón han perdido un tiempo precioso en el tratamiento de su enfermedad.
Benita, que sigue con sus maquinaciones, se entera de que su hermana quiere traspasar la Academia y niega que esto se pueda hacer. Por su parte, Trino sigue pensando que su hija Chelo se equivocará al casarse con don Santos.
En el Asturiano hay mucha confusión porque parece que el bar ha cambiado de manos. Entre los nuevos parroquianos del Asturiano está Restituto, el portero de una finca de la plaza de Santo Tomé. Se da a la bebida y trata despóticamente a su mujer, Casilda.
Sigue la preocupación de Manolita por Casilda, a la que no ha visto en todo el día. Cuando va a llevar un mandado a casa de los Hernández Salvatierra descubre que ha sido duramente maltratada por Restituto.
Manolita sigue buscando sin éxito un trabajo para su prima Felisa. Y aunque Marcelino está más animado porque el bar ha hecho el agosto gracias al grupo de de Coros y Danzas, ninguno de los dos se quita de la cabeza la situación de Casilda.
Jaime acompaña a su familia a la recepción en El Pardo, amenazando con montar un número. Pero, a la vuelta, Andrés se burla de él pues terminó comportándose de forma muy sumisa. Jaime prefiere evitar las humillaciones de su padre con su amigo Fede.
Alertada por Andrés, la policía entra en la vivienda de Restituto y descubren pruebas más que alarmantes de lo sucedido. Jaime va a adquirir un nuevo disco a la tienda de la plaza. Al conocer a la mujer del dueño de la tienda, se queda impactado por ella.
El barrio se hace eco del crimen de la portera y la desaparición de Restituto. Por su parte, Eulalia encuentra el diario de Almudena y descubre que su hija se siente atraída por Fede, el amigo de su hijo.
Adelina aplaca a una resentida Benita, apelando a su fibra sensible. Irene y Ubaldo pasan apuros económicos. Ubaldo intenta elevar la moral de Irene, recordando momentos felices. Pero esa noche a Irene le visitan fantasmas del pasado.
Andrés, sin dar una razón clara, se niega a cerrar el negocio con Germán Torres. Acaba sincerándose con Adelina y explicándole que está empezando a sentirse viejo. Benita advierte a su hermana sobre cómo Andrés la utiliza.
Marcelino sigue enfadado con Manolita y se niega a arreglar las cosas con ella. Manolita decide darle finalmente una explicación falsa que justifique su trabajo en la portería.
Luci inicia en la academia de baile una campaña a favor de Ubaldo y su música moderna. Adelina amenaza con echarla de allí si sigue alborotando a los bailarines. Fede rechaza el manifiesto escrito por Jaime y le insta a repetirlo.
Jaime tiene problemas a la hora de escribir su manifiesto y acude a Ubaldo para que le oriente y éste consigue aclarar sus ideas. Entre tanto Almudena descubre un borrador del manifiesto y chantajea a su hermano para que la lleve al baile del domingo.
Marcelino sigue enfadado por la ocultación que le hizo Manolita con el tema de Felisa. Cuando parece que van a hacer las paces, asoma Felisa por el bar pronunciando el mote que tanto odiaba Marcelino.
Jaime recibe la advertencia de Eulalia de no meterse en líos políticos y le prohíbe que vuelva a ver a su compañero Fede. La nueva casa de Felisa es demasiado pequeña para toda su familia, pero ella no piensa rendirse tan fácilmente.
Ubaldo tiene un detalle con Adelina, cada vez más prendada de los encantos del antiguo diplomático, a pesar de la opinión contraria de Benita. Irene está desesperada por no encontrar trabajo. Jaime quiere animarla y ella le advierte de un peligro que acecha al joven.
Trino no logra rellenar los impresos de matrícula de Pedrito. Al volver a casa se desahoga con su mujer y se pregunta si logrará hacerse un sitio en Madrid. Por su parte, Manolita ordena a su marido mantener en secreto todo el asunto del crimen de Casilda.
Felisa pone a Trino al corriente del crimen de la portera. Por su parte, Miguel sale en defensa de su hermano Pedrito en un altercado en la calle y acaba detenido en comisaría.
Marcelino consigue sacar a Miguel de la comisaría, gracias a antiguos contactos, ganándose así el cariño de Felisa. Se produce un emotivo encuentro entre ambos. Los porteros están preocupados porque la vida en Madrid es más cara de lo que esperaban.
Ubaldo ha llegado a tiempo para sacar a Irene de casa de los Hernández Salvatierra, el encuentro con Andrés ha sido breve, pero intenso. Ubaldo le explica a Irene que su situación ha cambiado tanto que ahora es Andrés quien puede hacerles daño.
Andrés, que se siente pletórico porque su entrada en el negocio en la construcción ha sido brillante, se entera de que su hijo anda metido en política contra el Régimen y tiene una fuerte discusión con él. Jaime termina marchándose de casa.
Felisa consigue trabajo de costurera para Asunción, mientras su hermana Chelo sueña con ser artista, aunque se da cuenta de que va a ser algo difícil. Miguel no se atreve a pedir trabajo en una empresa porque es de Andrés y le da reparo.
La madre de Fede visita a Eulalia para que Andrés saque a su hijo de los calabozos de la Dirección General de Seguridad. Andrés se niega y Almudena, al enterarse, tiene un gran disgusto. Manolita se siente mayor y con la moral por los suelos.
Miguel impide que un ladrón se lleve la cartera de Matías. A cambio de lo que ha hecho por él, Matías le consigue trabajo. Pero Miguel atribuye ante su madre el mérito a Trino. Pedrito continúa sus averiguaciones sobre la mano fantasma que tanto asusta a su padre.
Irene tiene una crisis de ansiedad tras escuchar a Hans Leyen hablar sobre los campos de exterminio nazi. Ésta despierta de una pesadilla y se descubre otra parte de su pasado que se desconocía.
Tras la desagradable escena vivida el día anterior con Hans Leyen, Irene se despide del trabajo, pero Leyen se niega a aceptar la renuncia .También Andrés, presionado por Eulalia, consigue que Fede sea puesto en libertad.
Chelo se enfada porque le han buscado un trabajo en una vaquería y ella lo único que quiere es ir a la academia de baile. Por otro lado, Irene acompaña a Manolita al médico y allí recibe una noticia completamente inesperada.
Tras dar la cara por ella ante Herr Leyen, Andrés ofrece a Irene el puesto de profesora de Almudena. A Ubaldo, sin embargo, no le hace ninguna gracia a que que trabaje para Andrés. Por otro lado, Adelina se siente mal y lo achaca al exceso de trabajo de la academia.
La oferta de trabajo de Andrés ha abierto una brecha entre Ubaldo e Irene que ninguno sabe cómo salvar. Mientras, Chelo se lleva a Pedrito a visitar la Gran Vía y le pierde en el ajetreo de la calle. Toda la Plaza de los Frutos se moviliza para encontrarle.
Eulalia se da cuenta de que su marido, por medio de Matías, trata de seguir colándola en casa a Irene. Chelo no le habla a Pedrito y éste, como ve que su madre puede endurecer el castigo de su hermana, decide confesar la verdad.
Nuevas discusiones en la casa de los Hernández Salvatierra. En plena batalla dialéctica aparece un documento que crea una profunda turbación en el ánimo de Jaime y le hace enfrentarse con su padre. Tras haber confesado su falta, Felisa levanta el castigo a Chelo.
Jaime está muy conmocionado con el descubrimiento de que Andrés puede no ser su padre. Por su parte, Irene y Ubaldo continúan viviendo su particular desencuentro y parece que la crisis se ha instaurado en el matrimonio.
Para especial gozo de Andrés, Irene, pese a la oposición de Ubaldo, acepta finalmente el trabajo en casa de los Hernández Salvatierra. Chelo, feliz y llena de vida comienza las clases en la Academia de Adelina con la complicidad de su hermana Asunción.
Andrés espera ansioso la llegada de Irene para comenzar las clases a Almudena, pero Matías aparece pidiéndole que lo acompañe para resolver un asunto urgente de negocios. Cuando llega Eulalia, se muestra con ella seca y autoritaria.
Tras la conversación que tuvo con Irene, Richi se siente obligado a visitar a Ubaldo y explicarle el motivo de su comportamiento. Chelo, con la complicidad de Asunción, consigue ir al estreno de "Mogambo", al que van también Marcelino y Manolita.
La petición de Adelina de que reconozca legalmente a Gloria como heredera ha puesto a Andrés contra las cuerdas. Mientras, Marcelino cuenta a su padre que "Mogambo" es una gran película aunque reconoce que el argumento es algo desconcertante.
Asunción se muestra muy afligida por haber perdido el empleo en casa de Eulalia e Irene se disculpa ante Eulalia por haber faltado a la clase de Almudena. Por su parte, Marcelino le da vueltas a la idea de adquirir un piso de la promoción de Andrés.
Eulalia leerá un poema que le ha aconsejado Jaime, pero el escrito causa estupor entre sus invitados. Manolita descubre que el folleto que echó a la basura se lo había dado Matías a Marcelino para animarles a comprar un piso, a lo que Manolita se niega.
Aparentemente, la enfermedad de Almudena no es más que un resfriado, pero preocupa su fiebre. Por su parte, Marcelino parece contento por no haber comprado finalmente el piso, pero cuando se encuentra con Andrés éste se lo vuelve a meter en la cabeza.
Aumentan las preocupaciones de Eulalia por la enfermedad de Almudena. Parece que teme que se cumpla una amenaza relacionada con su pasado y se refugia en los rezos y la iglesia mientras que Andrés no da excesiva importancia a la enfermedad de su hija.
Andrés oculta a Eulalia lo que ha ocurrido en la plaza y cubre a su hijo cuando éste regresa por la noche. En cierto modo se siente orgulloso porque Jaime se ha comportado como un hombre al defender a una muchacha.
Trino vuelve a sentir miedo, y esta vez lo focaliza en la mancha de humedad que hay oculta tras el calendario. Los nervios le atenazan y le dice a su mujer que solamente podrá superarlos si regresa al pueblo.
Joachim consigue eludir el peligro de Carreño a base de darle la razón en todo. Marcelino se ha decidido a hablar con Andrés para renunciar al piso apalabrado. Ahora tiene que soportar a Carreño para que éste no la tome con su familia.
Trino insiste en regresar al pueblo para resolver un asunto pendiente, relacionado con la guerra civil, que la aparición de la mancha en la pared le ha hecho revivir. Felisa exige que Miguel lo acompañe, y Trino tiene que pedir a Andrés permiso para su hijo.
Ubaldo e Irene tienen solo unas horas para conseguir el dinero para pagar la multa impuesta tras el registro de Casares. Ubaldo intenta sin éxito que Adelina les haga un préstamo. Irene vende su pulsera, el único objeto de valor que les queda.
Casares anuncia a Ubaldo e Irene que la multa que les habían impuesto ha sido anulada. Ubaldo arremete contra Irene porque cree que ha vuelto a pedir ayuda a Andrés. El enfrentamiento con su mujer le lleva a refugiarse en Richi.
Manolita se niega a aceptar que algo malo le pueda pasar. Marcelino parece desconcertado por los cambios de ánimo de su mujer y comparte su extrañeza con Pelayo. Mientras, Ubaldo empieza a asumir que Andrés ha debido ser quien les ha ayudado en el asunto de la multa.
Irene oculta la visita de Casares, pero Ubaldo no tarda en descubrir que ha habido un hombre en casa. Preocupado por descubrir el verdadero motivo por el que Irene le ha mentido, se confía a Richi, que trata de quitarle importancia.
Andrés, dispuesto a hacer pagar a Casares la violación de Irene, pide a Matías que investigue sobre su pasado. Aterrorizada por los malos presagios que creyó ver en la muerte de la paloma, Eulalia obliga a Almudena a levantarse para que reciba la Confirmación.
Manolita, torturada por el temor de padecer la misma dolencia que terminó con su madre al dar a luz y con la ayuda de Felisa, consigue ir sola al pueblo sin que nadie sospeche para hablar con la comadrona que la trajo al mundo.
Manolita se marcha al pueblo para obtener más información sobre su alumbramiento y la muerte de su madre. Marcelino siguiendo lo que le ha dicho Trino por encargo de Felisa, se muestra preocupado por Pelayo, quien no entiende el motivo de la solicitud de su hijo.
Eulalia da las gracias a Irene por haberla defendido ante su hija y acepta las disculpas de Juan Carlos por haberle tratado con rudeza a causa de un malentendido. Durante la merienda con el arquitecto, Almudena se comporta con una excesiva e inusual espontaneidad.
Andrés no quiere ver a Gloria pero al final no puede resistir su curiosidad. Eulalia despotrica contra su marido porque cree que no se preocupa bastante por Almudena. Le sorprende cuando llega a tiempo para llevar a su hija a realizar las pruebas médicas.
En casa de los Asturianos se vive un auténtico caos por la ausencia de Manolita. A su regreso las cosas vuelven a su sitio y Marcelino admite que no puede vivir sin ella. Manolita ha descubierto que la comadrona tuvo que decidir entre su vida o la de su madre.
Andrés se resiste a aceptar la enfermedad de Almudena. Eulalia sin embargo se siente culpable y se aferra a sus rezos. Andrés se vuelca en su otra hija, Gloria, quien poco a poco va indagando el pasado de sus padres. Por su parte, Jaime busca refugio en sus amigos.
La desgracia de Almudena hace que la estrategia de Adelina salga adelante. Andrés le comunica que incluirá a Gloria en su testamento. Cuando comienza a preparar las cosas de cara al notario, tiene un pequeño encontronazo con Matías.
Andrés consigue sacar a Gloria de su casa y obliga a Adelina a que la devuelva al internado. Por su parte, a Gloria sigue interesándose por el pasado de su madre y le llama especialmente la atención la distante relación que mantiene con Joachim.
Almudena se muestra muy dolida con su familia por haberle ocultado la gravedad de su estado y, tras comprender las consecuencias de su enfermedad, se encierra en su cuarto. Manolita sigue arrastrando su miedo tras la visita al pueblo.
Irene confiesa tener todos sus recuerdos bloqueados y pide ayuda a Úrsula. Andrés admite haber incluido a Gloria en el testamento pero se defiende de las acusaciones de su mujer haciendo valer el hecho de que no la ha reconocido legalmente como hija.
Eulalia irrumpe en la Academia e insulta a Adelina y Gloria produciéndose un duro enfrentamiento entre las dos madres. Eulalia considera injusto que la hija de Andrés acceda a los bienes que fueron de sus padres.
Matías informa a Andrés de que Eulalia ha acudido al marido de Cuca para que le cree problemas en la inspección de las obras. Por su parte, Almudena sufre una fuerte crisis cuando se entera de que sus amigas no acudirán a la merienda porque sus madres temen el contagio.
Andrés se marcha de su casa avergonzado por haber estado a punto de golpear a su mujer en presencia de Irene, que es quien lo ha evitado. Se acerca a ésta en la calle, le confiesa su desamor por Eulalia y logra conmoverla con su aparente sinceridad.
Asunción no obedece la prohibición de su familia de subir al principal para evitar un posible contagio. Sólo le preocupa el bienestar de Almudena y finalmente, con la complicidad de Chelo, va a visitarla.
Jaime propone definitivamente a Asunción que dé clases con Almudena. Eulalia pone todo tipo de trabas, pero Andrés le promete a Jaime mediar ante su madre. Jaime va a buscar a Asunción al taller para darle la noticia y Lupe toma nota de la amistad entre ambos jóvenes.
Ha llegado una invitación para que Ubaldo e Irene asistan a una recepción del cuerpo diplomático en el Ministerio de Asuntos Exteriores español. Ubaldo duda en ir puesto que se encontrará con compañeros que han aceptado seguir trabajando con el régimen de Guatemala.
La aparición de Basilio sigue llenado de incógnitas a Trino y Felisa: el anciano ha estado en un pueblo cercano al suyo, pero no saben para qué. Basilio persigue a una joven y luego le muestra a Pelayo una foto de ella tomada hace muchos años.
Irene comenta con Jaime lo ocurrido a Ubaldo tras su encuentro con sus antiguos compañeros de la carrera diplomática y empieza a considerar la idea de que Madrid no es lugar para ellos y tal vez deban volver emigrar.
Fina se disculpa ante Asunción porqué se siente culpable de lo ocurrido y no sabe cómo arreglarlo. Trino cuenta a Marcelino el calvario por el que está pasando Manolita y le pone al corriente de lo ocurrido desde que se enteró de su enfermedad.
La presencia de Asunción en casa de los Hernández Salvatierra supone un fastidio para Eulalia y una alegría para Almudena, que la considera una amiga. Miguel no ve con buenos ojos el acercamiento de su hermana con el hijo de los Salvatierra.
Irene pone a Jaime al corriente de las prevenciones de su madre hacia una posible relación entre él y Asunción. Jaime informa a Miguel de sus sospechas de que está detrás de la relación que provocó el despido del trabajador de la fábrica de su padre.
Eulalia ha invitado a Asunción a la fiesta familiar e Irene desconfía de sus intenciones. Pronto se descubre que está en lo cierto porque Eulalia pacta con Conchitín dejar en ridículo a Asunción. Jaime analiza con Ubaldo sus sentimientos hacia la hija de los porteros.
Jaime sueña que besa a Irene y eso le llena de sentimientos contradictorios. Desea hablar con ella, pero no se atreve a sincerarse. Por su parte, Almudena coquetea abiertamente con Juan Carlos mientras Asunción se enfrenta a ella.
Asunción llega llorando a casa y se encierra en su habitación sin explicar nada de lo sucedido en la fiesta, dejando muy preocupada a toda la familia. Por su parte, Bibiana, marquesa de Rocafermata, se presenta en el edificio de los Hernández Salvatierra.
Irene cura la herida de Jaime y hay un momento de proximidad entre los dos aunque hablen de Asunción. Trino comprende las razones de Miguel -darle una lección a Jaime para que no se burle de Asunción- pero teme que acabará siendo despedido.
Pelayo logra arrancar de Basilio unas palabras y la confesión de que, efectivamente, puede hablar pero no quiere admitirlo ante nadie. Mientras, Irene pide explicaciones a Ubaldo sobre el arma que ha encontrado y Ubaldo explica que es de Richi.
La familia de Felisa, convencida de que el despido es inminente, prepara su regreso al pueblo. Mientras, la noticia de la marcha de los porteros preocupa a Adelina, que ve como su negocio con don Vicente sobre Chelo se está yendo a pique.
Irene, muy entera, recibe el pésame de Adelina y Andrés, mientras Richi ayuda a los de la funeraria. Asunción, al saber lo sucedido, va a darle el pésame. Pelayo, Manolita y Marcelino están muy desconcertados y temerosos desde que han sabido que tienen un hijo.
Es el día del entierro de Ubaldo e Irene, emocionada, se despide de su marido. Almudena intenta convencer a su padre de que la deje ir al cementerio. Por su parte, Adelina se da cuenta de que la muerte de Ubaldo deja franco el camino de Andrés hacia Irene.
Irene constata lo sola que está y se refugia en el trabajo para olvidar el vacío dejado por la muerte de Ubaldo. Por su parte, Sancho vuelve de su viaje y Richi le entrega una carta que Ubaldo dejó para que se la haga llegar a Steven.
Marcelino y Manolita no aceptan devolver a la niña y ensayan todo tipo de estrategias para que nadie les obligue a hacerlo. Por otro lado, Pedrito está emocionado porque toda su clase participará como extra en una película de Pablito Calvo.
La orden judicial ha caído como un jarro de agua fría y en El Asturiano se preparan para devolver a la niña. Mientras, Asunción se enfrenta a un nuevo día de trabajo: Rogelio le da un memorándum para escribir a máquina y ella se pone nerviosa.
Amalia revela a Andrés que Almudena les ha estado mintiendo y que se ve a escondidas con un muchacho. Por otra parte, Marcelino intenta, sin éxito, conseguir la mediación de Andrés para impedir que les quiten a la niña.
Ante Andrés se extiende un verano monótono y solitario, con una Almudena constantemente quejosa ante las exigencias de Amalia. Unas lúcidas y a la vez enérgicas palabras de Felisa logran finalmente romper el bloqueo de Manolita ante su hijo.
Benita comienza a difundir la noticia de una posible boda de Adelina en Málaga, pero Goyo regresa de su gira, extrañado por no tener noticias. Amalia se siente en la obligación de reconvenir a Andrés por su vida desordenada.
Los peores temores de Fina se confirman: Leona puede llegar a ser un peligro para su relación con Miguel. Por su parte, Benita va ganándose la fidelidad de Goyo a base de presentarlo a todos como si fuera el director de la escuela.
Pelayo trata de levantar la moral de Macelino y Manolita, pero es la llegada del carné del Atlético para Marisol Gómez Sanabria lo que les inyecta energía para seguir luchando. Mientras, Almudena se rebela contra Amalia por haber requisado y roto una carta de Sancho.
Miguel ha quedado muy afectado por lo que pasó tras su defensa de Leona. La sola idea de la comida con los padres de Fina le hace pasarse toda la mañana de domingo huraño y malhumorado. Por su parte, Amalia se despide de Almudena.
Irene se vuelca en las clases de Almudena, quien, con el cambio de profesora, se muestra mucho más dispuesta. Marcelino y Manolita, por otra parte, están traumatizados por lo sucedido con Marisol.
Miguel ha quedado con Leona para que le ayude a solucionar el problema con Fina, pero la jugada le sale mal. Por su parte, Andres habla con la madre superiora del colegio y le ofrece pagar unas reparaciones para que su hija sea bien tratada en los exámenes.
Benita llega a la conclusión de que quizá haya que alejar a su sobrina y comienza a anunciar que irá a estudiar al extranjero. Por su parte, Almudena se aprovecha de la buena voluntad de Irene para salir con Sancho y descuidar una vez más los estudios.
Asunción encuentra a Leona refugiada en el despacho de la fábrica, pero también ve allí a Rogelio en actitud equívoca. A espaldas de Miguel, Fina pide ayuda a Asunción para que las cosas vuelvan a ser como antes entre ella y su hermano.
Andrés recibe una carta de su hija Gloria alertada por la falta de noticias de Adelina. Por su parte, Manolita intenta averiguar las verdaderas razones que hay detrás de que su prima se haya negado a vender las tierras.
La proximidad de los exámenes de Almudena intensifica la presencia de Irene en casa de Andrés, quien aprovecha para intentar acortar terreno con ella. Mientras, Jaime y Asunción se reencuentran en la fábrica tras la separación del verano.
Trino quiere convencer a Felisa de que deben vender las tierras, pero su mujer no da su brazo a torcer y hay más discusiones en el seno de la pareja. Paralelamente, ha llegado el momento del examen de Almudena, y Andrés se asegura de que apruebe.
La discusión entre Felisa y Manolita se extiende a todos, quedando ambas familias enfrentadas. Basilio es quien más preocupado parece. Mientras, Andrés respira aliviado al ver que Jaime y Asunción conservan cierta sintonía después de todo.
Benita ha empezado la última parte de su plan, al tiempo que va alcanzando la cumbre de su locura: poco a poco irá suplantando a Adelina. Mientras, Eulalia regresa a casa. Sus hijos, Matías, su amiga Cuca, la reciben con mucho cariño, todos excepto Andrés.
Andrés vuelve a visitar a Irene para pedirle una respuesta pero ella le ruega que no insista.Por otro lado, a Fede y Jaime el Gobierno Civil les ha denegado el permiso para legalizar su asociación cultural.
Marcelino regresa de ver a Monseñor, pero solo puede anunciar que recibirán una visita. Andrés está frustado porque no consigue ver a Irene. Alertada por la falta de noticias de su madre, Gloria se presenta inseperadamente en Madrid y va a buscar a Andrés.
Andrés y Gloria irrumpen en la academia y sorprenden a Benita en una situación comprometida. Benita descubre que Andrés y Gloria se han aliado. Por su parte, Manolita lleva todo el día temiendo no pasar una supuesta investigación eclesiástica.
Matías busca a Andrés a instancias de Eulalia y cuando lo encuentra, éste, completamente borracho, confiesa su obsesión por Irene. Matías, para proteger a Eulalia, avisa a Irene para que se marche del barrio.
Tras el asalto de la tienda, Irene y Úrsula llegan al convencimiento de que algo tienen que ver los Hernández Salvatierra, en especial Matías. Por su parte, Gloria está a punto de descubrirlo todo y Adelina, bajo amenaza de Benita, decide callar.
La visión del tatuaje de Andrés ha despertado recuerdos del pasado en Irene que Úrsula se encarga de descifrar. Irene se da cuenta de que Andrés es responsable de la tragedia que marcó su vida y que supuso la muerte de su madre.
Gloria pone a Goyo al corriente del hallazgo del borrador de la carta: Benita ha estado falsificando la letra de Adelina. Por su parte, Jaime no entiende las razones que han podido llevar a Matías y a su padre a enfrentarse de ese modo.
La pelea por lo ocurrido en la tienda de discos ha terminado de dinamitar la relación entre Matías y Andrés. Matías da por terminada su alianza, pero Andrés intenta evitarlo apelando a los años de amistad y al secreto que les une desde los tiempos de la guerra.
Benita cancela las clases de la Academia y suplanta a su hermana para notificar que Gloria no va a continuar en el colegio. Luego, aísla a su sobrina del mundo exterior y se propone acabar también con ella.
Benita corre la voz de que su sobrina se va a estudiar fuera y consigue una carretilla para trasladarla a la academia. Chelo, que descubrió que el tramoyista, padre de su hija, va a ir a la portería para arreglar el ascensor, no está dispuesta a verle otra vez.
Adelina, haciendo un gran esfuerzo de voluntad, mantiene la cordura de Gloria, a la vez que intenta negociar con Benita. Por su parte, Irene empieza a seducir a Andrés y este, gratamente sorprendido por el cambio de actitud de Irene, se hace ilusiones.
Adelina consigue que Gloria se sobreponga a la desesperación y a la sospecha de que en el baúl se oculta el cadáver de Goyo. Mientras, la aparición del tramoyista, convertido ahora en mecánico de ascensores, ha descolocado a toda la familia de Chelo.
Benita, a punto de suicidarse y matar por el camino a Gloria y Adelina, es interrumpida in extremis por Andrés y acaba siendo detenida por la policía. La noticia corre como un reguero de pólvora por el barrio y nadie acaba de comprender lo sucedido.
Andrés necesita sincerarse con Irene, mostrar su desconcierto y dolor ante los acontecimientos tan tremendos que ha vivido. Por su parte, Jaime, confuso ante el hecho de tener una nueva hermana, muestra su pesar a Asunción.
Asunción pasa todo el día ilusionada ante la expectativa de un nuevo encuentro con Jaime. Secretamente confía en poder reconducir su relación con él. En la oficina tiene un rifirrafe con Rogelio y, siguiendo el consejo de Leona, decide ir al encuentro de Jaime.
Trino ha oído que es posible que el lunes vuelvan a abrir la cochera. Así que decide ir para ver si es verdad y, sin pretenderlo, le nombran negociador entre sus compañeros para que llegue a un acuerdo con los que mantienen una postura más beligerante con la empresa.
Después de comprobar que han desaparecido las fotos comprometedoras de Sancho, Jaime piensa que puede haber consecuencias. Por su parte, Fina ha preparado la cita con Asunción y su primo. En un principio Asunción parece reacia, pero decide ir.
Steven impide in extremis que Irene cometa una locura y mate a Andrés. Steven oculta a Irene que conocía sus intenciones y se esfuerza por recordar a Ubaldo y por apartar de su cabeza la idea de una venganza.
Jaime informa a sus padres de que le han abierto un expediente disciplinario y tiene que someterse a una comisión en la que se decidirá qué sanción se le impone. Steven recaba la ayuda de Ursula y Chelo para no dejar a Irene a solas con Andrés.
Andrés, frustrado por no poder estar a solas con Irene, descarga su ira en casa. Eulalia le pide que no siga amargando la vida de sus hijos. Trino tiene un enfrentamiento sonado con Elías, el jefe de taller que está organizando toda la revuelta de las cocheras.
Se ha publicado un artículo sobre el crimen de Benita. Marcelino ha salido en primera plana y se pone contento por la popularidad que ha adquirido. Por su parte, Matías ha regresado de Guinea y se entera de los últimos acontecimientos.
El extraño comportamiento de Pelayo y sus salidas a la misma hora sin razón aparente preocupa a sus hijos. Steven cree que ha llegado el momento de cesar en el marcaje a Irene para que pueda citarse con Andrés y hacer frente de una vez a su pasado.
Es el día de la cita de Irene con Andrés. Irene se prepara a conciencia y deja el arma en un lugar al que pueda acceder fácilmente. Adelina y Gloria van a visitar a Eulalia para agradecerle todo lo que ha hecho por ellas.
El falso desmayo de Sancho sirve para que, mientras éste está entreteniendo a Irene, Steven encuentre el arma que aquélla ocultaba. Chelo, siguiendo indicaciones de Steven, intenta retener a Andrés, que dirige a casa de Irene, fingiendo que se ha puesto de parto.
Jaime discute con su padre a raíz del expediente: ha perdido la matrícula y tendrá que irse a otro distrito universitario si quiere seguir estudiando. Andrés, harto, se niega en redondo: quiere que entre a trabajar en la fábrica.
Steven cuenta a Irene la verdad de lo que hizo Ubaldo: castigó a los culpables y evitó que Irene se manchara las manos llevando a cabo su venganza. Chelo deja la casa de Irene y vuelve a la suya con la niña. Miguel encuentra finalmente a Leona.
De Barcelona comunican a Manolita que pueden llevar a Marisol para un reconocimiento: quizá su caso tenga tratamiento. Andrés se enfada porque una vez más Jaime y Eulalia le han desautorizado. Como Eulalia se defiende, Andrés le da una bofetada.
Basilio tiene urgencia de ir al Asturiano porque ha concertado una partida crucial con Sebas, por eso pide a Trino que le sustituya en la portería. Chelo y Steven tratan de ayudar a Irene. Finalmente, Steven le propone contratarla como intérprete en París.
Trino, pese a los consejos de Felisa de que se mantenga al margen, acaba yendo a casa de Elías y es insultado y acusado de asesino por sus familiares. En casa de los Hernández Salvatierra se recibe la noticia de que ha habido un accidente y Eulalia está en el hospital.
Asunción y Miguel se esfuerzan por borrar la pintada contra Trino antes de que su madre la vea, pero Felisa acabará descubriendo los insultos hacia su hijo. Sancho se mantiene cerca de Almudena para ayudarla a sobrellevar un trago tan duro.
La visita de Matías al hospital ha alterado aún más a Andrés, que lucha por reprimir las ganas de responsabilizarle del accidente. Los difíciles momentos que está pasando Trino hacen que Felisa y Basilio cierren filas en torno a él y hagan un canto de sus virtudes.
Don Gonzalo se deja de tapujos y revela a Andrés el verdadero estado de Eulalia: su columna está destrozada. Irene, muy ilusionada con la decisión de Chelo de hacerla madrina, sigue desmantelando la tienda y regala unos discos muy queridos a Marcelino y a Manolita.
Para desesperación de Felisa, Miguel regresa de comisaría sin noticias sobre la detención de Trino. Cuando está sola con Almudena, Eulalia tiene otra crisis que mantiene a todos en vilo. Matías lee la carta de Eulalia y entiende la gravedad última de todo lo ocurrido.
Marcelino facilita a Felisa, a través de Sebas, la dirección de un abogado. Felisa pide a Miguel que la acompañe, pero Rogelio no le da permiso. Matías prepara su final, testifica a favor de Jaime y Almudena y nombra albacea a don Gonzalo.
Asunción recibe una carta de despido de Rogelio de manos de una nueva secretaria. Felisa está algo más animada porque el abogado le ha conseguido un permiso para ver a Trino.
Asunción asume que la habrán despedido tras el incidente con don Rogelio. Explica a Felisa que su jefe quería ayudarla si ella le agradecía sus favores de manera poco ética. Úrsula y Basilio siguen con el simulacro de su noviazgo pero Irene descubre el engaño.
Almudena, destrozada por la muerte de su madre, es consolada por Gloria. Por consejo de Basilio, Miguel y Asunción preparan el libro de firmas. Felisa se encarga de amortajar a Eulalia. Marcelino, Manolita y Pelayo dan el pésame a Andrés, pero Irene se resiste.
Se celebra el entierro de Eulalia. A él acude el vecindario, los trabajadores de la fábrica y amigos de la familia. Pedrito está pasándolo mal por el hecho de que su padre esté detenido y, para defender su inocencia, se enfrenta a unos compañeros de la escuela.
Pedrito se queda una semana sin ir a la escuela. El niño quiere demostrar la inocencia de su padre, pero no sabe cómo. Por su parte, Cuca trata de presionar a Jaime para que se enfrente a su padre y aleje a Adelina.
Andrés empieza a planear quedarse solo en casa para preparar su enfrentamiento último con Matías y le pide a Adelina que vaya. Por su parte, Miguel, preocupado por el bautizo de la hija de Chelo, será finalmente el padrino actuando por poderes en nombre de Trino.
Leonor da una nueva idea a su padre sobre cómo encontrar a Héctor, pero el plan parece no tener éxito. Mientras, Jaime y su padre tienen una conversación telefónica que los hace sentirse próximos, y Asunción recibe una carta que Jaime le ha escrito desde la estación.
Marcelino pone a Héctor al corriente de la detención de Trino y de las sospechas que recaen sobre él. Héctor no está seguro de poder hacer mucho. Mientras, Adelina ha tenido una corazonada de que algo puede ir mal y teme que Andrés haya decidido cometer una locura.
Adolfo, el director y propietario de la revista "Sucesos", y su esposa Rocío viajan a Santander para entrevistarse con Teresa y Ana. Por su parte, Felisa y Trino tienen un emocionado encuentro en la cárcel.
Se va a formar un equipo de fútbol juvenil y a Marcelino le vienen recuerdos del pasado, ya que fue un futbolista aficionado junto con Antonio en una agrupación de la UGT. Por su parte, Andrés y Almudena se dan cuenta de que deben pasar página.
Irene duda en ir al estreno de Richi, pero tras un breve encuentro con él, decide asistir acompañada de su tía. Finalmente será Chelo quien irá con ella. Por su parte, Almudena, muy angustiada porque Sancho no ha aparecido a su cita ni la ha llamado, pide ayuda a Irene.
Trino ha decidido declararse culpable de la agresión a Elías. Con ello espera conseguir reducción en una posible condena. Mientras, Irene se siente culpable de la situación de Steven: si no hubiera vuelto a España para ayudarla ahora no estaría detenido.
En el último episodio de la sexta temporada, cuando Irene decide despedirse de Steven, sucederá algo entre ellos que provocará un importante cambio en su relación. Su última apuesta será hacer uso de todos sus contactos en la embajada de Guatemala.