Vor (El ladrón)

En la Unión Soviética de 1952, un joven viuda y su hijo de seis años conocen en un tren a un atractivo y carismático capitán del Ejército Rojo que los toma bajo su protección. Pero, aunque carismático, el hombre pronto se rebela como cruel y despótico, además de como un auténtico ladrón. Enamorada de él a pesar de sí misma, la mujer le seguirá en su nómada existencia, siempre moviéndose de un lugar a otro cuando la seguridad de él se ve amenazada. Por su parte, el niño establecerá con el ladrón una peculiar relación de adoración y miedo.

Una producción rusa que fue candidata al Oscar a la mejor película de habla no inglesa en 1998, así como al Goya a la mejor cinta europea del mismo año. Visualmente imaginativa, la cinta tiene dos lecturas: una en la que el personaje del protagonista rememora su infancia pasando sus inocentes recuerdos por el cedazo de la experiencia y otra, más subliminal, en la que el ladrón puede ser visto como Stalin y el niño, como la Nueva Rusia que debe librarse a sí misma del tirano.