Operación: Juego final

Dos bandas rivales de asesinos tienen su sede en unas instalaciones subterráneas secretas. Cuando un nuevo recluta se une a uno de los grupos, descubre que su jefe ha sido asesinado y que han sido encerrados en la base, convertida en una bomba de relojería.

Tras poderse ver durante un cortísimo periodo de tiempo en algunas salas de cine de los Estados Unidos, esta comedia de acción pasó directamente a comercializarse en DVD. De bajo presupuesto y machacada por la crítica, "Operación: juego final" cuenta con algunos actores de renombre que tratan de hacer de gancho comercial: Zach Galifianakis ("Resacón en Las Vegas") -cuya aparición es más bien breve-, Rob Corddry ("Jacuzzi al pasado"), o Emilie de Ravin ("Recuérdame") se alternan con otros intérpretes más desconocidos. Todos ellos bajo la batuta de un director que se estrena con este trabajo, Fouad Mikati. Y empieza con mal pie, pues el filme ha sido acusado de contar con una premisa absurda y gran cantidad de diálogos sin sentido. Eso sí, el espectador que espere acción a raudales, encontrará en este producto de serie B casi hora y media de entretenimiento.