Misión blanca

A una misión española en Guinea llega un nuevo sacerdote. Allí es recibido por un anciano misionero que le relatará la historia del padre Javier, hijo de un banquero sin escrúpulos que tuvo que salir de España tras cometer un importante fraude. Llegó a Guinea con idea de aprovecharse de las numerosas riquezas del país. Allí su hijo se hará misionero, cruzándose el camino de ambos muchos años después, cuando el banquero, sin reconocer a su hijo, intente terminar con su vida.

El director Juan de Orduña es el encargado de poner en pantalla esta epopeya heroica de los colonos españoles, para crear riqueza para el país y salvar y evangelizar a los salvajes de Guinea Ecuatorial. Con este planteamiento, "Misión blanca" se presenta como uno de los títulos más célebres del cine colonialista, con todo lo que conlleva de racismo y menosprecio por otras culturas. De todos modos, salvando esos parámetros, el film llega a entretener.