La diva

Cynthia Hawkins es una famosa cantante de ópera que se niega a que su voz aparezca en ninguna grabación. Jules, un joven francés que trabaja como mensajero, decide entrar en uno de los conciertos de la diva con una grabadora para poder obtener una cinta que le permita escuchar la voz de su ídolo siempre que quiera. Un par de criminales de Taiwan, que a diferencia de éste quieren hacerse con una grabación para vender cintas pirata, empiezan a perseguirle. Jules también es perseguido por un par de matones que creen que la cinta de Jules contiene pruebas que demuestran la conexión de un importante político con la mafia.

El director francés Jean-Jacques Beneix (“Betty Blue”) debutó en la dirección con este peculiar thriller de acción en el que utilizó recursos propios de la ‘nouvelle vague’, así como un ritmo trepidante. El resultado fue un filme que fue muy buen recibido por la crítica y que ha influido posteriormente a directores como Quentin Tarantino. Uno de los aspectos más alabados de la película fue su fotografía, a cargo de Philippe Rousselot, quien ganaría el César por esta película y el Oscar una década más tarde por su trabajo en “El río de la vida”.