Al final del túnel

Joaquín es un ingeniero informático paraplégico que se mueve por casa en una silla de ruedas. Un día, mientras trabaja en su sótano, escucha un ruido casi imperceptible y descubre que una banda de ladrones está construyendo un túnel que pasa bajo su hogar con la intención de robar un banco.

El director y guionista de Rosario Rodrigo Grande ("Cuestión de principios") firma este vibrante thriller que, pese a tomar como base la manida temática del atraco al banco, huye de cualquier estructura vista hasta el momento en el género. Que la tensión no decaiga en ningún momento es el objetivo de la brillante interpretación de Leonardo Sbaraglia ("Relatos salvajes"), quien se mete en la piel de Joaquín, un discapacitado físico que vive en una casa lúgrube y oscura y que pone un anuncio para alquilar una habitación.

Cabe destacar que la película es una coproducción entre Argentina y España, por lo que no es de extrañar que Clara Lago interprete al personaje que ocupa dicha estancia. La protagonista de "Ocho apellidos vascos" encarna a Berta, una bailarina de estriptis que se instala en la casa junto a su hija Betty.