Los problemas de financiación de Martin Scorsese por culpa del coronavirus

María Estévez

20/04/2020 a las 00:52h.

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Parece una broma, pero un filme dirigido por Martin Scorsese y protagonizado por Leonardo DiCaprio y Robert De Niro puede tener problemas de financiación. El miedo a la situación económica generada por el Covid-19 ha hecho que Paramount Pictures reconsidere invertir 200 millones de dólares en Killers of the Flower Moon , el próximo proyecto del trío: Scorsese/DiCaprio/De Niro.

La cinta se encontraba en preproducción dentro de Paramount Pictures hasta que el coronavirus puso en cuarentena todos los proyectos. Reconsiderando su situación, a los ejecutivos del estudio les incomodaban las cifras y se quejaron de que ni siquiera Transformers, uno de sus grandes blockbusters, había logrado esa inversión. Al equipo de Scorsese les dijeron que empezaran a hablar con otros distribuidores, tipo Apple o Netflix , para repartir la carga de la producción y aliviar la falta de dinero líquido que, aparentemente, sufre Paramount.

Para el realizador neoyorquino la noticia no era novedad, le pasó exactamente lo mismo con «El irlandés» cuando Paramount sintió vértigo y terminó dejándole tirado para que Netflix viniera a hacerse cargo del filme. Esta vez la historia tiene más drama porque Netflix, que no se llevó ningún Oscar por «El irlandés», cuestiona si merece la pena volver a invertir un cuarto de millón de dólares en una película de Scorsese .

Las dudas de Netflix abren la puerta a otros jugadores y Apple ve la posibilidad de entrar a las ligas mayores de Hollywood de la mano de tres grandes. « Apple se va a llevar la película en esta subasta porque es quien más la necesita », reveló el productor Andrew Wallenstein a la revista Variety.

El regreso de DiCaprio a una película de Scorsese es una garantía de éxito; en popularidad y en dinero, aun invirtiendo en ella 200 millones. Para Apple supone la oportunidad de rodar su primer gran filme y escapar de los límites de la televisión. Muchos en Hollywood consideran que este filme, por la situación creada por el Covid-19, podría ser el puente para un nuevo estilo de coproducción entre un estudio y una plataforma; compartiendo Netflix los gastos con Paramount, o bien la suma de dos plataformas si Apple y Netflix se animan a dividirse los beneficios. La subasta está abierta y a estos tres jugadores puede unirse Amazon que mira lo que ocurre desde la distancia.

Titulada « Killers of the Flower Moon », la cinta de Scorsese está inspirada en el libro del autor David Grann que, a su vez, se basa en los asesinatos de los indios de la nación Osage ocurridos en Oklahoma durante la década de 1920 que fueron el nacimiento del FBI. La narración explora una América cambiante en una zona rural donde la codicia y el prejuicio racial tuvieron como consecuencia la matanza de muchos indios nativos. Todo comienza cuando los indios Osage descubren un depósito de petróleo enterrado debajo de su tierra que los hace millonarios de la noche a la mañana. Sin embargo, los Osage eran considerados incompetentes por el gobierno por lo que debían ser tutelados por sus vecinos blancos y repartir con ellos sus bienes, esencialmente se vieron obligados a compartir el dinero del petróleo. Si ser considerados inútiles por el gobierno y recibir la orden de dividir las ganancias con sus llamados guardianes civilizados ya era bastante malo, luego llegaron los oportunistas en busca de su riqueza. Poco a poco, todos los miembros de la tribu Osage fueron asesinados sin que la policía local hiciera nada ante el horrible derramamiento de sangre. La situación llamó la atención del Gobierno Federal dirigido por un joven J. Edgar Hoover .

El libro narra varios asesinatos, comenzando con la familia Burkhart. Después de que el cadáver de su hija, Anna Brown, fuera descubierto en un barranco con una bala en la parte posterior de la cabeza, no pasó mucho tiempo hasta que mataron a más miembros de la familia. Un par de ellos fueron envenenados, mientras que otros estuvieron involucrados en una explosión. Cuando los asesinatos comenzaron a aumentar, Hoover y su equipo decidieron intervenir. El investigador envió a Tom White, un ex Ranger de Texas, que tuvo que permanecer encubierto y reclutar a delincuentes locales (contrabandistas y asaltantes de ganado) para ayudarle con el caso. La investigación convirtió a William K. Hale en su principal sospechoso.

Hale era un ex ganadero transformado en ayudante del sheriff y una figura prominente del crimen organizado. Era conocido por intimidar, mentir y atacar a las personas de su comunidad, controlando a todos y a todo. Su influencia se extendía incluso sobre los profesionales médicos a quienes pagaba. Razón por la que pudo encubrir los envenenamientos. Los lugareños estaban pagados por su bolsillo o tan aterrorizados que se negaban a hablar con los investigadores. Hale tenía conexión con la familia Burkhart. Su sobrino era Ernst Burkhart, un hombre blanco casado con la hermana de Anna, Mollie. Los asesinatos se llevaron a cabo en un orden específico, por lo que Ernest eventualmente heredaría los títulos de la familia. Resultó que Hale y Ernest habían urdido el plan, aunque el sobrino finalmente testificó contra su tío. Con Hale tras las rejas, el caso quedó cerrado y se estableció por primera vez la Oficina del FBI (Oficina Federal de Investigación). Sin embargo, la investigación de Grann descubrió que cientos de asesinatos siguen sin resolverse hasta el día de hoy. De hecho, incluso se podría decir que muchos de ellos fueron cepillados bajo de la alfombra del olvido. Los hallazgos del FBI revelaron que al menos dos docenas de asesinatos ocurrieron entre 1921 y 1926. Mientras que los descubrimientos de Grann revelan que el “Reino del Terror” duró décadas. Los miembros de la Nación Osage fueron las personas más ricas per cápita del mundo. Pero, al poco tiempo de lograrlo, empezaron a morir en circunstancias misteriosas. Al hablar durante la promoción de The Irishman sobre su nuevo proyecto Scorsese nos explicó “Va a ser un western localizado en Oklahoma. Ciertamente son vaqueros, pero tienen autos y también caballos. El viejo mundo frente al nuevo mundo. La película trata principalmente de los Osage, una tribu india a la que se le dio un territorio horrible, pero que a ellos les encantó porque se dijeron a sí mismos que los blancos nunca estarían interesados en visitar aquella tierra. Luego descubren el petróleo y, durante unos diez años, se convirtieron en la gente más rica del mundo. Pero igual que ocurrió con las regiones mineras de Yukón y Colorado, desembarcaron los buitres; el hombre blanco, el europeo y todo acabo. El inframundo tenía tanto control sobre la ley que era más probable ir a la cárcel por matar a un perro que por matar a un indio”. No cabe duda que, de conseguir la financiación, este Western de Scorsese y DiCaprio promete ser una revelación donde los villanos dejarán de ser los indios.

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