Crítica de 'Baila con la vida': Al rescate de la mujer madura y engañada

No hay grandes conflictos, ni grandes coreografías o pasiones, pero la historia queda colocada en ese lugar agradable para ver cualquier tarde

Fotograma de 'Baila con la vida'
Oti Rodríguez Marchante

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La actriz Michèle Laroque cultiva en su segunda película como directora ese género tan querido y trasteado por el cine francés de la comedia sentimental, esa que es graciosa y ligera a medias y con una cierta presunción de seriedad, como si tuviera escondidas entre sus personajes, situaciones y diálogos unas valiosísimas hebras de azafrán intelectual. La historia es la de una mujer, que ella misma interpreta, a la que el guion le impone una serie de circunstancias ya muy visitadas por los guionistas, el descubrimiento de su marido con su amante, los cambios que ese golpe le obligan a tomar en su vida y los diversos encuentros que le esperan.

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Baila con la vida

Baila con la vida

‘Baila con la vida’ es una película alegre, de lo cual se ocupa, además del tono elegido por la directora, un personaje especialmente bien trabajado, el de su hermana ( Isabelle Nanty , una actriz que sabe jugar con la cámara), una mujer soltera, disparatada y con una conciencia social deformada que se presta a la caricatura y a la risa. La relación de la protagonista con su hermana y sus amigos, aprendices de bailarines, coloca al argumento en un carril que ya conoce el espectador y que le deja abierto solo un pequeño imprevisto: ¿cuál de los dos amigos será el que la rescate de sus esponjosas nostalgias de mujer engañada? Esos dos personajes los interpretan Thierry Lhermite y Patrick Timsit, dos buenos actores aunque queden algo sosainas en comparación con la fuerza de ellas, en especial de Isabelle Nanty, que se come la película como si fuera una ‘gilda’, ese pinchito salado, agrio y picante.

No hay grandes conflictos (el vulgar de la infidelidad, aunque sea con su mejor amiga, o el cierre de la escuela de baile), ni grandes coreografías o pasiones, pero la historia queda colocada en ese lugar agradable para ver cualquier tarde.

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