Crítica de 'Irati': Fantasía medieval y leyendas vasconas
La empresa de Urkijo es arriesgada, porque no rehúye ni la épica en las batallas, ni la lírica y el folclore en los ambientes, ni la fantasía en la construcción de monstruos, magias, efectos especiales y leyendas
Paul Urkijo Alijo consigue con su segundo largometraje una hazaña poco habitual en el cine español, entrar con más que dignidad técnica en ese género imposible (al menos, por aquí) de la aventura medieval, el relato mitológico y bélico y el drama romántico, y construir una historia llena de potencia, imaginación visual y sentido histórico.
El protagonista es Eneko, hijo del líder de un valle pirenaico cercano a Roncesvalles que defiende la zona contra las tropas de Carlomagno: un escenario impresionante al que el director le exprime toda su belleza y su atmósfera de magia y leyenda. Irati es, además del nombre del valle, una joven que pertenece al bosque y al agua, una lamia (criatura ancestral y mitológica) que ayuda a Eneko a recuperar el poder y salvar la amenaza que se cierne sobre el valle y sus tradiciones.
La empresa de Urkijo es arriesgada, porque no rehúye ni la épica en las batallas, ni la lírica y el folclore en los ambientes, ni la fantasía en la construcción de monstruos, magias, efectos especiales y leyendas, una fusión de naturalismo ambiental con irrealismo o surrealismo narrativo. Pero sale victorioso por lo atractivo de su aventura y de sus personajes, interpretados por Edurne Azcárate y Eneko Sagardoy , muy metidos en la complicada y rugosa piel de sus papeles.
Ficha completa
Irati
El hecho de estar dialogada en vascuence y de manejar ritos y folclore ancestral vascón le añade un punto de credibilidad y realismo a pesar de la fantasía, utopía, que subyace en la fábula, excelentemente fotografiada por Gorka Gómez Andreu y musicada por Maite Arroitajauregi y Aránzazu Calleja. Y con la alusión a aquel encontronazo que paró a Carlomagno y su imperio expansivo en Roncesvalles, que originó lo que luego sería el Reino de Navarra. Muy interesante ver la película, tan esforzada y distinta, y lo que la rodea.
