Crítica de ‘El año de la furia': Pasiones y presiones bajo una bota desatada

Alberto Ammann, Joaquín Furriel y Daniel Grao protagonizan el filme, que viaja a los meses anteriores al golpe de estado de 1973 en Uruguay

Joaquín Furriel y Alberto Ammann en ‘El año de la furia'
Oti Rodríguez Marchante

Esta funcionalidad es sólo para registrados

El título de la película hace referencia a los meses anteriores al golpe de Estado de 1973 en Uruguay y a la ebullición y represión de las Fuerzas Armadas, que tomaron el control del país y de los ciudadanos. La película arranca y termina con ese ‘NO’ terco que hace un limpia parabrisas de coche y pasa también con ese movimiento sobre la superficie del cristal por los hechos acaecidos, por el papel de la política oficial y de la geopolítica estadounidense, que solo se apunta para centrarse en un pequeño grupo humano, sus relaciones, padecimientos e implicaciones. En el foco de la cámara están dos guionistas de un programa de humor crítico en televisión , papeles que interpretan Alberto Ammann con pasión y Joaquín Furriel con misterio en exceso subrayado, y alrededor de ellos, su círculo, un complicado grupo de personajes, relaciones y sentimientos que se debaten entre el folletín, la presión política, la amistad y el amor.

Ficha completa

También se ocupa el director de la trastienda, de los ‘milicos’, de su parte dura y de terror, y de su parte ‘blanda’, como los personajes que interpretan Miguel Ángel Solá y Daniel Grao, entre la tortura, la infelicidad y la cobardía. En fin, es un enjambre de personajes, tipos y conductas, que ambienta y narra bien un episodio histórico aunque sin la profundidad de la biopsia , como un limpia parabrisas sobre un cristal.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación