Muere el dramaturgo y guionista francés Jean-Claude Carrière, colaborador de Buñuel

Falleció a los 89 años y contribuyó a la obra del director español durante casi veinte años

AFP

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Con su muerte, resulta definitivamente evidente que la obra de Jean- Claude Carrière (1931 - 2021), como guionista, dramaturgo, adaptador, poeta, narrador, realizador, letrista, actor, memorialista, en solitario o acompañando a varios de los directores de cine y teatro más grandes de su tiempo, como Luis Buñuel , Andrzej Wajda , Jean-Luc Godard , Peter Brook , ilumina de manera espectacular varias de las tragedias más grandes de nuestro tiempo, de los populismos internacionales a los estragos de los multiculturalismos.

Carrière fue un autodidacta de genio, nacido en el seno de una familia de viticultores muy modestos, donde «no había libros ni imágenes». Hasta finales de la pubertad, el futuro guionista de genio alternaba en familia la lengua francesa y la occitana de su pueblo natal Colombières-sur-Orb , en la Cataluña francesa.

La decisión paterna de abandonar el terruño para instalarse como regentes de un bareto de la periferia parisina más modesta, proleta y multicultural, Montreuil , al norte de París, decidió para siempre su vida. Carrière no hizo grandes estudios. Y no fue brillante como bachiller.

Pero escribió muy pronto una decena de novelas, entre la serie negra y el «terror», que tenían a un Frankenstein muy particular como protagonista. Carrière alternó esa primera faena literaria con su trabajo como guionista de Pierre Étaix , cineasta, actor, dibujante, payaso, mago, dramaturgo. Tal para cual.

El trabajo a dúo enter Carrière y Étaix fue el «prólogo» ideal para el trabajo que comenzaría muy pronto (1964) con Luis Buñuel , como guionista de una obra maestra absoluta, radicalmente actual, 'Diario de una camarera' . Tras un fondo «erótico», «sádico», «surrealista», esa película cuenta la inquietante ascensión de las bandas ultra nacionalistas y ultra populistas que intentaron asaltar la Asamblea Nacional, en la Francia de los años 30 del siglo XX. El precedente más claro y profético del intento de asalto al Capitolio con el que terminó la presidencia de Donald Trump .

Carrière escribió con Luis Buñuel otra media docena de obras maestras, convertido en uno de los guionistas más universales y famosos de su tiempo. Cuya obra forma parte de una revisión cinematográfica de algunos de los grandes cataclismos de nuestra época.

'Danton' y 'Los poseídos' de Andrzej Wajda y Carrière, cuentan la historia de los orígenes totalitarios y nihilistas del terrorismo de Estado y el terrorismo individual. Carrière también aportó su visión literaria personal de grandes obras filmadas por Godard, Louis Malle, Milos Forman, Volker Schlöndorf, Fernando Trueba, Jacques Deray, Philippe Garrel , entre otros.

En otro terreno, la colaboración teatral de Carrière con Peter Brook tiene una importancia semejante a la colaboración cinematográfica con Buñuel.

La pareja Brook / Carrière imaginaron y pusieron en escena una versión dramática del 'Mahabharata' , el mítico poema épico hindú escrito tres siglos antes de Cristo. Un monumento legendario. Brook / Carrière también adaptaron juntos a Shakespeare y otros clásicos del canon universal. Pero su «Mahabharata» inauguraba de manera espectacular el tema con mucho futuro del diálogo y tensiones entre civilizaciones, que estaría en el corazón de un drama personal de Carrière: 'La controversia de Valladolid' , un drama histórico filosófico, donde dos grande figuras de la cultura española, Bartolomé de las Casas y Juan Ginés de Sepúlveda , dialogan y se disputan sobre el «sentido» de la colonización, el diálogo y enfrentamientos de culturas y civilizaciones en la Nueva España. Mucho antes del 'Black Lives Matter' , un debate filosófico sobre las tensiones y diálogo entre culturas y civilizaciones.

La docena de dramas escritos por Carrière tratan muchos otros temas. Sus sesenta y tantos guiones oscilan entre la aventura sentimental y lo sublime. Sus adaptaciones y traducciones favorecieron el diálogo entre culturas y civilizaciones. Con un interés especial por las tradiciones españolas encarnadas por Buñuel, Goya, Bergamín, Trueba , entre otros. Y una fascinación por las civilizaciones orientales, del budismo a la épica hindú.

Carrière rechazó todo tipo de honores académicos. Y a la hora de hacer un balance final, en sus memorias, recordaba con cariño filial su educación infantil, en la mesa familiar de unos modestos viticultores de la Cataluña francesa, hablando occitano, compartiendo el pan y el vino con los extranjeros que llegaban de lejanos parajes, incluso cruzando la frontera española, a pie, desterrados celestes.

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