POLÉMICA. Meses después de su celebración, las cuentas del Encuentro han provocado enfrentamientos en el último Pleno. / A. MARTÍN
Jerez

Las cuentas del Encuentro generan tensión entre los hermanos mayores

El Consejo no confirma que haya déficit ya que aún no están los números El Ayuntamiento adeuda 24.000 euros

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«Oficialmente nadie ha dicho que haya déficit. Cuando se confirme, se dirá de dónde se saca el dinero, pero el Consejo no tiene otra fuente de ingresos que los palcos y las sillas». Con estas declaraciones, el portavoz del Consejo Local de Hermandades y Cofradías, José Antonio González de la Peña, confirmó que, en caso de que sean realidad las deudas que ha provocado la celebración del Encuentro de Cofradías en nuestra ciudad, el dinero saldrá de las propias hermandades y cofradías.

De la Peña ha corroborado también que el Ayuntamiento aún debe pagar 24.000 euros, pero se estima que la deuda final se duplicará, alcanzando un montante global a pagar cercano a los 50.000 euros. Todos los hermanos mayores consultados por LA VOZ han confirmado que «en un pleno anterior se acordó que no saldría ni una peseta de las cofradías para pagar el Encuentro», aunque el portavoz del Consejo ha querido desmentir esta afirmación, aseverando que «se dijo que se procuraría que el Encuentro no costara dinero, pero de ahí a que no le vaya a costar dinero a las cofradías hay un pequeño matiz».

Por tanto, dos visiones distintas para el mismo problema, ya que mientras que el secretario cree que si hay un exceso de gastos habrá que hacerle frente, Mateo López, hermano mayor del Consuelo cree que «si se decidió que no costara un duro a las hermandades, ahora no debería tocarse», aunque se muestra muy cauto ya que su hermandad aún no genera dinero de palcos y sillas al no pasar por la Carrera Oficial.

Un pleno tenso en el que incluso el hermano mayor de las Cinco Llagas, Francisco Barra, solicitó que no se celebrara el pleno por faltar en la citación la firma del Presidente del Consejo y de su Secretario, ya que «no se ajustaba ni a derecho ni a forma. Si no han tenido tiempo ni de firmar, cómo nos van a presentar un presupuesto».

La última discrepancia fue la forma de gestionar las actas de los plenos, ya que se solicitó por parte de algún hermano mayor que las actas estuvieran pasadas a mano. Sin embargo, el secretario y portavoz afirmó que estaban hechas en soporte informático, «llegando incluso a preguntar a los hermanos mayores si querían que se pasasen a mano, a lo que ninguno respondió».

En cualquier caso, para saber la solución habrá que esperar al próximo Pleno de cuentas, a celebrar tras el verano.