El aumento de los ingresos impulsa el superávit del Estado hasta los 10.857 millones

Las cuentas públicas mantuvieron en los dos primeros meses del año la buena evolución del ejercicio anterior, en el que el conjunto de las administraciones públicas lograron el primer superávit de la democracia (un 1,1% del PIB). Hasta febrero, el Estado obtuvo un saldo positivo de 10.857 millones de euros, gracias a una importante alza del 15,1% en los ingresos. El resultado equivale a un 1,13% del PIB y supone un incremento del 31,2% respecto al año pasado.

Pese a felicitarse por el buen dato, el nuevo secretario de Estado de Hacienda y Presupuestos, Carlos Ocaña, quiso dejar bien claro que se trata de un indicador «escasamente significativo». Y es que, según destacó, el corto periodo de tiempo que abarca es insuficiente para saber si la tendencia positiva se mantendrá. Ocaña aprovechó su primera intervención en el Congreso como número dos de Hacienda y Presupuestos para hacer un alegato a favor de la «prudencia».

El superávit de enero y febrero fue posible gracias a que los ingresos crecieron un 15,1%, hasta los 28.477 millones de euros, mientras que los gastos sólo ascendieron un 7%, hasta los 17.620 millones de euros. La capacidad de endeudamiento del Estado ascendió a 5.736 millones de euros, cuando hace un año tenía una necesidad de deuda de 528 millones.