Nacieron en una tarde fría, con un césped casi congelado, a las afueras de Madrid, en el seno de una fábrica de talentos. Fue allí donde aparecieron los fantasmas de Valdebebas. El Xerez que llegó a la ciudad deportiva del Real Madrid había sufrido algún que otro traspié, pero seguía conservando una áurea de equipo temido, probablemente el más respetado de la categoría. La espectacular remontada de los azulinos multiplicaba las esperanzas de que el sueño se hiciera realidad, pero tras la estela de Jurado y De la Red aparecieron una serie de fantasmas que se han subido a la chepa del equipo de Lucas Alcaraz.