en materias como el nuevo Estatuto catalán o la lucha antiterrorista

Zapatero se defiende de las acusaciones de Rajoy de que su gestión es "una vergüenza"

Reprocha al presidente del PP que critique el contenido del acuerdo del Gobierno con CiU sobre el Estatut cuando desconoce su contenido

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El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, abogaba hoy por el respeto en democracia frente a las consideraciones realizadas por el líder del PP, Mariano Rajoy, en las que calificaba de "una vergüenza" la actuación del Ejecutivo en el debate sobre el Estatuto catalán y en la lucha antiterrorista.

En la sesión de control al Gobierno en el Congreso, en la que Rajoy ha preguntado a Zapatero por los contenidos del acuerdo alcanzado con CiU en torno al texto catalán, el presidente del PP confiaba en que el jefe del Ejecutivo "se arrepienta pronto" de su actitud. Zapatero reprochaba por su parte a Rajoy que critique el contenido del acuerdo sobre el Estatut cuando, según dijo hoy ante el pleno el dirigente del PP, desconoce el contenido del mismo.

En el inicio del debate, el líder del PP explicaba que en apenas cuatro meses el Gobierno y CiU han llegado a dos acuerdos distintos, por lo que, tras criticar la "falta de seriedad" o la "burla" que supone, preguntaba a Zapatero cuál es el válido. Rajoy aseguraba que su partido sólo conoce el contenido del acuerdo por las "páginas web de CiU y de un diario nacional", al tiempo que inquiría a Zapatero respecto a si éste será estable para una generación.

El jefe del Gobierno subrayaba al respecto que el acuerdo alcanzado sobre el Estatut cumple los objetivos planteados de impulso autonómico y de reformas estatutarias para esta legislatura, tanto para Cataluña como para otras comunidades autónomas. Estos objetivos están fundados en un "aumento de las competencias para mejorar la gestión de los servicios públicos ante los ciudadanos" y en una "modernización de lo que ha de ser la reforma del modelo de financiación, que incorpore mayor responsabilidad a las CCAA, mayores posibilidades en función de su gestión y que mantenga la solidaridad como elemento clave".

Zapatero señalaba que el acuerdo "innova fórmulas de relación bilateral entre, en este caso, la Generalitat y el Estado, que irán en beneficio de la gestión de las competencias de una y otra administración, porque avanzaremos en el fomento de la cooperación". Además, el jefe del Gobierno espera que el PP "participe constructivamente, como es su estilo habitual", en el trámite parlamentario en esa "búsqueda de un amplio consenso" para el Estatuto catalán y el resto de las reformas que se lleven a cabo. "Ese es el deseo del Gobierno y me gustaría que fuera el deseo del PP, al menos en alguna ocasión".

A quién creer respecto al contenido del acuerdo de financiación

Sin embargo, respecto al sistema de financiación, Rajoy reprocha a Zapatero que el diputado de CiU en el Parlamento catalán, Francesc Homs, haya dicho que este modelo supone para Cataluña en un año 5.128 millones de euros, mientras que el presidente catalán, Pasqual Maragall, lo haya cifrado en 3.000 millones, y la página web de CiU en 4.310 millones. "Ayer, el ministro de Economía, Pedro Solbes, dijo que el acuerdo a él no le vincula porque es entre partidos y que él no tiene la culpa de que el secretario general del PSOE viva en La Moncloa", apostillaba el líder del PP, antes de recordar que asimismo, ayer, el ministro de Administraciones Públicas, Jordi Sevilla, señalaba que "el acuerdo de financiación nada tenía que ver con lo que había usted acordado con Artur Mas".

Por ello, Rajoy preguntaba a Zapatero a "quién deben creer", aunque advertía de que él no cree en el presidente del Gobierno. "Hace mucho tiempo que he perdido la confianza en usted, otros podrán comprobarlo a lo largo de las próximas fechas". "Lo que sí le digo es que lo que está usted haciendo en este tema y en el de ETA es una vergüenza, de la que espero que se arrepienta pronto".

En su última intervención, Zapatero destacaba que él no ha perdido la confianza en Rajoy, ya que ésta es la "base del respeto en democracia". Por ello, el jefe del Gobierno ha dicho tenerle a Rajoy "mucho respeto porque le han votado diez millones de ciudadanos, y al PSOE once millones".