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El Xerez espera comenzar el nuevo año igual que terminó el anterior

Alcaraz apostará por el bloque que le ha llevado a lo más alto de la tabla El Nàstic es mejor lejos de su feudo

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«Comenzar el año igual que lo acabamos». Esa es la consigna, el mensaje y sobre todo la intención del vestuario del Xerez, que arranca el año en Tarragona con la esperanza de que el 2006 sea definitivamente el año en el que se meta entre los más grandes.

Jugadores y técnicos han coincidido en que las vacaciones no han perjudicado al plantel. Es más, parece que todos han respetado las reglas y el sobrepeso no servirá de excusa para no sacar algo positivo del Nou Estadi de Tarragona. Eso sí, hasta el momento todo han sido palabras y ahora llega la hora de demostrar sobre el terreno de juego que el parón navideño no ha perjudicado.

La sensación que dejó el equipo antes de las vacaciones no pudo ser mejor. El listón está muy alto. Según la filosofía de Lucas Alcaraz -hay que ir partido a partido- la de esta tarde en Tarragona será la primera de las 24 finales que restan hasta el final de la competición.

El preparador granadino ha apostado por una convocatoria en la que llama la atención el gran número de centrocampistas. La pareja de medios centros que saltarán al césped del estadio catalán es toda una incógnita. Candidatos no faltan: Vicente Moreno, Sergio Castaño, Dani Pendín, Álex Colorado y, la novedad en la lista, Álex Fernández parten con opciones parejas. Es cierto que Moreno tiene más ventaja que ninguno, pero su acompañante se encontrará en el aire hasta una hora antes del partido.

El que ha sufrido este aumento de centrocampistas ha sido García Granero, que se queda en Jerez tras mucho tiempo entrando en los planes del preparador xerecista. El interior zurdo ha sido descartado por decisión técnica.

En la defensa y en el ataque no se esperan demasiadas novedades. Los cuartos traseros parecen que repetirán, pues Mendoza, Gerard, Bajic y De Coz se han convertido en intocables. Arriba Geijo y, salvo sorpresa, Camuñas, tratarán de seguir sumando goles que permitan al Xerez llegar por delante al duelo estelar del próximo domingo frente al Recre.

El Nàstic, con moral

El ánimo del conjunto de Tarragona está alto porque, en caso de victoria, se colocaría «a sólo uno o dos puntos del ascenso», según manifestó el técnico Luis César Sampedro. Para Luis César, el partido reúne muchos alicientes: «Primero, si ganamos subiremos cuatro o cinco puestos en la tabla. Segundo, nos visita el líder. Tercero, jugamos en casa y alegraremos a la afición».