Los lavaeros
«A mi niño de mi alma le he comprado una trompeta, un pito y una zambomba, un sable y dos panderetas, un trompo y una tinaja y un gorrito de bayeta…»
A mi niño de mi alma le he comprado una trompeta, un pito y una zambomba, un sable y dos panderetas, un trompo y una tinaja y un gorrito de bayeta…». Así era la letra del comienzo de un tango que ensayábamos un grupo de ...
Artículo solo para registrados