Fotograma de «Patch Adams»
Fotograma de «Patch Adams» - abc

Robin Williams, el primero que hizo reír a Christopher Reeve tras su terrible accidente

Se hizo pasar por un proctólogo ruso loco que quería examinar al actor de Superman tras su gravísima caída del caballo, que le dejó tetrapléjico. Eran amigos íntimos

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De Robin Williams se sabe casi todo, aunque hay algunos detalles tan sencillos como grandiosos de su vida privada, tirando a desconocidos y que fueron difundiéndose tras su fallecimiento hace justo un año, que han agigantado su leyenda. Valga una hermosa anécdota para demostrarlo: el actor fue la primera persona que hizo reír a Christopher Reeve, su amigo-hermano, tras su fatal accidente a caballo, que le había dejó tetrapléjico. Y no lo tenía fácil, evidentemente.

Era 1995 y Reeve acababa de sufrir la terrible desgracia acaecida en una competición hípica. En la grave caída, el actor que interpretó a Superman se fracturó las dos primeras vértebras cervicales y la espina dorsal, quedando su cuerpo casi paralizado, lo que le dejó atado a una silla de ruedas e impedido para respirar sin asistencia médica.

Tal como relató la periodista Bárbara Walters, según le contó Reeve al que fue a entrevistar al hospital, en los momentos más sombríos de su temporada entre doctores y enfermeras pensó en suicidarse. Incluso lo habló con su familia. «Tumbado sobre mi espalda, helado, era incapaz de evitar pensar en las ideas más oscuras», escribió Reeve en su autobiografía, según recoge «The Daily Mail»

En esta situación, y con una complicada operación a la vista, estaba Reeve solo tumbado en la cama del hospital, cuando llegó un doctor y le dijo que se diera la vuelta. «¿Qué?», exclamó el actor, que estaba literalmente flipando. El doctor parecía ser ruso, por su acento, y se comportaba como un perturbado. Decía ser su proctólogo y quería examinarle. «Era Robin Williams haciendo de una especie de loco doctor ruso», dijo Reeve, que se río y tuvo una suerte de epifanía gracias a su gran amigo: «Lo supe entonces: si puedo volver a reír, puedo volver a vivir». Williams estaba interpretando al doctor Kosevich, un personaje que está como las maracas y que aparece en la película «Nueve meses».

Ambos actores se habían conocido y habían compartido habitación en Juilliard, en la Escuela de Artes de Nueva York, en 1973, y desde entonces se hicieron inseparables. Tras la muerte de Williams hace justo un año, la familia del actor de Superman mandó un comunicado a la revista «People»: «La familia Reeve, como muchos otros, se acordará de Robin por el humor, la energía y el brillo que trajo a nuestras vidas a través de la pantalla. Lo vamos a recordar, sin embargo, por el apoyo silencioso y constante que mostró a nuestra familia a través de los momentos más difíciles».

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