Representantes de la Unesco, el Convenio Ramsar y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza visitan Doñana

Representantes del Centro Patrimonio Mundial de la Unesco, el Convenio Ramsar y la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) visitaron ayer Doñana para evaluar sobre el terreno su estado de conservación.

Distintas organizaciones españolas quisieron reunirse con el panel internacional. SEO/BirdLife, por ejemplo, puso de relieve la amenaza que supone para el espacio andaluz el proyecto de reapertura de las mimas de Aznalcóllar -cerradas desde el desastre de 1998-, así como la necesidad de continuar con los trabajos de restauración hidrológica en la marisma del Guadalquivir y las cuencas vertientes.

«La sobreexplotación del acuífero -WWF pide que se actúe con contundencia contra los más de mil pozos ilegales y se opone a la división del acuífero en cinco zonas, tal y como propone la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir- y otros graves efectos derivados de los usos agrícolas intensivos -WWF demanda que se establezca un calendario de ejecución para el Plan de la Fresa, que ha tardado siete años en gestarse- siguen lejos de estar controlados y la inacción y falta de inversión del Estado y la Junta de Andalucía están poniendo en jaque el futuro de este espacio natural», explica en una nota José Eugenio Gutiérrez, delegado territorial de SEO/BirdLife en dicha comunidad autónoma.

Sobre las especies protegidas, la organización ha mostrado su profunda preocupación sobre la grave situación del conejo en Doñana, cuyas poblaciones han descendido un 90% a causa de una variante del virus de la neumonía hemorrágico vírica (NHV), así como los efectos que tendrá a medio plazo sobre la conservación del águila imperial ibérica.

WWF, por su parte, ha declarado que las autoridades españolas han incumplido las recomendaciones para Doñana realizadas hace cuatro años por estos mismos organismos internacionales –Unesco, Ramsar y la UICN-. La ONG ha entregado un informe al equipo desplazado hasta el espacio andaluz donde analiza, entre otras cuestiones ya enunciadas, los planes de Gas Natural-Fenosa para crear un almacén subterráneo de gas en Doñana, «pese a que la Junta de Andalucía se niega a entregar los permisos para este peligroso proyecto, al considerar que el Gobierno no evaluó correctamente sus impactos acumulativos sobre la Red Natura 2000».