El precio del litro de gasolina ha subido esta semana un 1,4 % y vuelve a rozar los 1,5 euros, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea. El litro de gasolina, que ya había subido un 0,13 % la semana pasada, cuesta ahora 1,498 euros, lo que supone un incremento del 10 % con respecto a enero y del 13,9 % en relación a la misma semana del año pasado.
Por su parte, el gasóleo se encareció esta semana un 0,7 % y, tras una quincena de subidas, registra un precio de 1,428 euros el litro, un 6,8 % superior al marcado en enero y un 12 % por encima del de la misma semana de 2011. Este combustible se encuentra ahora a apenas 1,6 céntimos de su máximo histórico de 1,444 euros, marcado en la última semana de agosto.
Con estas cifras, el llenado de un depósito medio de gasolina de 55 litros requiere 82,3 euros, diez euros más que hace un año, mientras que en el caso del diésel es necesario 78,5 euros, 8,8 euros más que en la misma semana de 2011.
Este incremento en los precios de ambos combustibles se produce en un momento en el que el precio del crudo tiende a estabilizarse tras subir en semanas anteriores. El barril de crudo Brent, de referencia en Europa, cuesta en la actualidad 113 dólares.
Lo que es destacable es la llegada de gasolineras de bajo coste, con instalaciones más pequeñas y modestas, cuyos precios son claramente inferiores. En algunos barrios de Madrid, se puede encontrar el litro de gasolina sin plomo de 95 octanos a 1,40 euros o menos y el diésel por poco más de 1,30 euros.
Repsol, que ya asume parte de la subida del IVA para reducir el precio para el consumidor final, también ha reaccionado a tal agresiva competencia y ofrece precios incluso inferiores a los valores medio oficiales en las estaciones de servicio cercanas.
