El trío de españoles que cada fin de semana copa la mayoría de podios en Moto3 tendrá en Montmeló una nueva oportunidad para demostrar sus dotes sobre el manillar. Maverick Viñales, Álex Rins y Luis Salom contarán además en esta ocasión con un rival menos, en teoría, en su lucha por la clasificación final. Jonas Folger llegará al GP de Cataluña condicionado por una fisura en la mano derecha. El piloto alemán del Mapfre Aspar sufrió una caída hace una semana mientras practicaba motocross en su tiempo libre. Lleva desde entonces inmovilizado y sin posibilidad de competir, por lo que se presentará bajo de moral. Al menos esa es la razón que ha dado el alemán para no autodefinirse como «el favorito en esta ocasión», según ha reconocido él mismo en diversas declaraciones.
Con el alemán fuera de juego en un principio, el ‘top 5’ de la categoría del octavo de litro que en el gran premio pasado entró en meta separado por solo 0.819 segundos ahora se convertirá en un cuarteto. Los cinco primeros de la categoría más pequeña no protagonizaban un final tan ajustado desde el mismo gran premio italiano de 2008. Para Cataluña el que se encuentra con más ganas de agradar a su público en casa es Viñales. El gerundense se ha manifestado a favor de las pequeñas, pero importante, mejoras que ha logrado hacer en su moto durante los últimos días.
No se olvida Maverick de su gran contrincante. «Llegamos líderes y con muchas ganas de hacerlo bien”, señaló al recordar que cuenta únicamente con cuatro puntos de ventaja sobre su compatriota Salom (KTM) al frente del Mundial. Es precisamente el mallorquín el que más seguro de sus posibilidades está. Asegura que el circuito se ajusta «a la perfección» a su modo de pilotar, gracias a la anchura y las curvas que tiene en el diseño final. Es por ese motivo por el que se ve con ganas de empezar e intentar arrebatar a los catalanes que corren en la categoría el orgullo de vencer en su tierra.
