El ejecutivo regional recauda un 144% más por intereses derivados del REF

La Consejería de Economía, Hacienda y Seguridad del Gobierno de Canarias, que dirigió Javier González en los últimos cuatro años, se afanó en 2014 para que los intereses, recargos y sanciones a causa de incumplimientos de la normativa de los tributos del régimen económico y fiscal (REF) engrosaran efectivamente las arcas de la Administración autonómica. Cuando menos se esforzó mucho más que en 2013, según se desprende del análisis comparativo de los datos de los dos últimos años. Un análisis que revela un incremento de la recaudación de un 144% ya solamente en concepto de intereses de demora, recargo y apremio.

Las cifras oficiales a que ha tenido acceso ABC descubren que los susodichos intereses de demora, recargo y apremio reportaron el último ejercicio a los fondos públicos de la región algo más de dos millones de euros. Una cantidad que en 2013 no había llegado a 850.000 euros, de modo que el aumento fue, exactamente, del 143,9%.

Este no es, sin embargo, el único concepto que permite apreciar ese mayor esfuerzo del ejecutivo del Archipiélago para recaudar más por medio de sanciones, si bien su peso en el total sigue siendo irrisorio.

Economía y Hacienda separa los «intereses de demora, recargo y apremio», que supusieron esos más de dos millones de euros, y los «intereses de demora del REF». Estos últimos apenas dejaron en las arcas públicas 576.500 euros, una suma que resulta significativa, no obstante, si se tiene en cuenta que estos intereses no habían reportado cantidad alguna en 2013. Y lo mismo puede decirse en el caso de las sanciones tributarias por el REF, que en 2014 ascendieron a poco más de 532.000 euros y que un año antes no habían supuesto ni un solo euro. También ocurrió con los recargos por declaraciones extemporáneas (casi 6.000 euros el último ejercicio) y con los recargos de apremio (cerca de 12.000 euros), aunque la recaudación fue en ambos casos muy pequeña.