La Policía estrecha la investigación en el entorno de conocidos del asesinado en Calatayud

La Policía está estrechando la investigación por el crimen de Calatayud en el entorno de conocidos de Luis Miguel Julián Hernández, el hombre de 47 años que fue asesinado en su domicilio y cuyo cuerpo fue hallado el viernes pasado, 9 de octubre.

Como avanzó ayer la edición impresa de ABC en Aragón, la puerta del piso en el que vivía la víctima no estaba forzada y la llave colgaba del bombín por el interior de la vivienda. Tampoco estaba revuelto el domicilio, lo que descarta que el móvil del crimen fuera el del robo.

Los investigadores se inclinan por que el asesinato haya tenido motivaciones de carácter personal, relacionadas con la vida privada de la víctima, soltero, sin trabajo conocido y que convivía en el piso con su madre, quien falleció hace mes y medio.

La Policía sospecha que la víctima conocía a su asesino, ya que todos los indicios apuntan a que fue él mismo quien le abrió la puerta.

El crimen pasó desapercibido durante días. Prácticamente pasó una semana desde el asesinato hasta que fue hallado el cuerpo apuñalado en el interior de la vivienda. Fue a raíz de que unos amigos de la víctima, alarmados al no saber nada de este hombre desde hacía días, no dar con él por teléfono ni en casa, lo pusieran en conocimiento de la Policía.

Los investigadores llevan días buscando datos que les pongan sobre la pista del autor del crimen. Para ello han realizado una amplia recopilación de testimonios entre vecinos y conocidos del hombre asesinado. La investigación va estrechándose en esa dirección mientras el juzgado de Calatayud mantiene el secreto de sumario.