El Ayuntamiento lleva al Consell el plan de soterramiento de las vías del tren

El Ayuntamiento de Alicante ha aprobado hoy enviar al Consell, con los únicos votos en contra de EU, el planeamiento del soterramiento de las vías del tren en el centro de la ciudad, el cual incluye 1.700 nuevas viviendas, un área comercial de 25.000 metros cuadrados y una zona verde de 157.000.

El visto bueno se ha producido en un pleno extraordinario que ha contado con la participación de dos movimientos vecinales posicionados a favor y en contra del proyecto.

De éstos últimos, Carmen Navarro ha hablado como portavoz de la Plataforma Comarcal por la Movilidad Sostenible (PCM) para explicar a los concejales que ellos se oponen, entre otros motivos, porque se mantiene la estación ferroviaria donde está - sin su retranqueo a la Vía Parque -, lo que imposibilita crear un verdadero «pulmón verde» en el centro de Alicante, del tipo del parque del Retiro de Madrid.

También se oponen porque con el plan, se demolerá el Puente Rojo, infraestructura «icónica» y que abarata la operación, y sobre todo porque subordinará el desarrollo al «soterramiento especulativo» y a las posibles plusvalías de Adif, que creen que tardarán muchos años en producirse.

Por el contrario, Pascual Pérez, de la Plataforma Renfe, ha aplaudido el proyecto para conseguir el objetivo planteado hace 19 años de unir los barrios de la ciudad y ha valorado los casi 160.000 metros cuadrados de nuevas zonas verdes.

La portavoz del PP, Marta García-Romeu, ha asegurado que se trata del «proyecto de todos» y que el 95 por ciento del suelo tiene destino dotacional público, por sólo el 5 restante de uso lucrativo.

Ha apostado por que, una vez que el Consell de luz verde en unos meses y el plan vuelva para la reparcelación y urbanización a través de la sociedad Avant, haya un concurso internacional de ideas para lograr el mejor parque urbano posible, con árboles, láminas de agua y pasos para bicis, peatones y uso deportivo.

Además, ha destacado que se han recogido diversas aportaciones de los vecinos, sobre todo de los barrio de Ciudad de Asís, la Florida, Benalúa y Alipark.

La socialista Loles Fernández ha argumentado el apoyo de su grupo en que el plan ayuda a eliminar la «cicatriz» que suponen las vías a su paso por la ciudad, y, tras indicar que no es el proyecto favorito de su partido, ha recordado que Adif es el propietario del 80 por ciento del suelo.

Además, ha confiado en el concurso de ideas para desarrollar posteriormente la urbanización para recoger las demandas de la ciudad.

El portavoz de EU-IU, Miguel Ángel Pavón, ha sido muy crítico por depender de las plusvalías «irreales» que consiga Avant y porque se sustituye el «parque central» de 300.000 metros cuadrados por otro de la mitad de extensión que se convierte en un «parque estafa, seguramente con macetas, flores y setas castedianas», pero sin árboles pese a la necesidad que hay de ellos en ese entorno.

También ha lamentado la alta edificabilidad, las 1.700 viviendas cuando ha dicho que en la ciudad hay más de 25.000 desocupadas, que se mantenga la estación en el centro, lo que evita que la zona verde llegue al corazón de la ciudad, y la demolición del puente Rojo para hacer un paso subterráneo que encarecerá el proyecto, ha apuntado, en 7,2 millones de euros.

El único concejal de UPyD, Fernando Llopis, ha calificado de «bueno» mantener la estación en el centro y ha defendido no retrasar más la actuación y que, una vez que el Consell diga que sí, priorizar el parque verde.