El nombramiento de Stephen Bannon desata la polémica

Es una de las figuras más importantes de la prensa nacionalista ultraconservadora y ha azuzado posiciones racistas, antisemitas y misóginas desde sus portales

NUEVA YORK Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

En su primera gran decisión como presidente electo, Donald Trump envió un mensaje muy claro: quiere ser capaz de trabajar con el establishment republicano, pero no dará la espalda al movimiento que le ha aupado a la Casa Blanca ni abandonará su discurso agresivo y nacionalista. Para lo primero ha nombrado a Reince Priebus, hasta ahora presidente del partido republicano, como su jefe de Gabinete. Para lo segundo, ha colocado a Stephen Bannon como estratega jefe de la Casa Blanca y su principal asesor.

El nombramiento del segundo es lo que ha desatado un aluvión de críticas en EE.UU. Bannon, al que Trump fichó a comienzos de agosto como presidente de su campaña, es una de las figuras más importantes de la prensa nacionalista ultraconservadora.

Desde 2012 hasta su incorporación a la campaña, fue el presidente ejecutivo de Breibart, una plataforma de medios que acentuó sus posiciones nacionalistas y anti establishment bajo su liderazgo.

Breitbart ha azuzado posiciones racistas, antisemitas y misóginas desde sus portales. Por ejemplo, comparó la labor de clínicas abortistas con el Holocausto, calificó al comentarista republicano Bill Kristol de "judío renegado", llamó a que se enarbolaran las banderas confederadas –un símbolo racista para la mayoría de EE.UU.– poco después de la matanza en una iglesia negra de Charleston, aseguró que la solución al acoso "online" a las mujeres es que se desconecten de Internet y que los métodos anticonceptivos hacen a las mujeres "poco atractivas".

El fichaje de Bannon ha provocado críticas de la Liga Antidifamación, la asociación de derechos civiles de la minoría negra NAACP, del Consejo de Relaciones Islámico-americanas y de muchos miembros del partido demócrata.

Muchos republicanos han preferido no opinar sobre Bannon y, en su lugar, alabar el nombramiento de Preibus, un líder sin apenas visibilidad hasta este año y que ha ascendido después de apagar un sinfín de incendios entre Trump y el partido.

El presidente electo deberá retomar el anuncio de nombramientos de altos cargos, y entre quienes más suenan están Richard Grenell, que asumiría el puesto de embajador ante la ONU y que se convertiría en el primer miembro de un Gabinete abiertamente gay.

Ver los comentarios