El negocio progresista

Si algo tienen de bueno los populismos es que cuando alcanzan el poder quedan al desnudo con mucha facilidad. Esto es lo que le ha pasado a Ada Colau. Venía con grandes proclamas contra las grandes empresas eléctricas, haciendo bandera de su lucha contra la pobreza energética y vendiéndose como David frente al malvado Goliat. Pero hoy la realidad es muy diferente. Con el «gobierno más progresista de la historia» al frente de la Moncloa, el precio de la electricidad ha alcanzado el récord histórico de 700 euros MWH sin que David haya ni empezado a preparar la honda ante la mirada perpleja de sus fieles seguidores que veían en Podemos y el PSOE sus grandes defensores; y la explicación es muy simple: Goliat no eran las grandes empresas eléctricas sino los propios gobiernos 'progresistas' que ven como sus arcas aumentan sus ingresos con cada subida del precio de la luz.

Es el caso del Gobierno del Estado, que ingresará 3.300 millones de euros más en un año, y el caso también de Barcelona Energía, la empresa pública de energía de Barcelona que venía a ser la gran competidora de las 'perversas' Endesa o Iberdrola, y que hoy ve aumentar considerablemente sus beneficios gracias al enorme precio que pagan los barceloneses cada vez que usan la electricidad.

Desde Valents hemos pedido al gobierno de Colau/PSC que cierren Barcelona Energía porque es una indecencia hacer negocio a costa de una mentira que pagamos todos los barceloneses. La respuesta es que no. Quizás, porque Barcelona Energía está hoy presidida por un teniente de alcalde de Colau que dice luchar contra la pobreza energética, pero que cada año firma unas cuentas de una empresa con cuantiosos beneficios y escaso servicio público.

Votar populismos es relativamente más fácil que otorgar tu confianza a quien te habla con sinceridad y sin falsas promesas, pero el precio que pagas por ello como ciudadano es mucho más alto que el precio de la luz.

Eva Parera es presidenta de Valents