Fiestas ‘sin paz’ para la Policía

‘Tengamos la fiesta en paz’ , como dice el refrán. Nadie en su trabajo debería ser recibido con pitidos, abucheos ni mucho menos soportando un lanzamiento de objetos. Y menos si se trata de hacer cumplir la ley. Ante esta hostilidad se han tenido que enfrentar los agentes de la Policía en Palencia y en Cuéllar , en ambos municipios durante sus días más grandes.

En la primera población, el desalojo de una zona de copas ha provocado un altercado que se ha saldado con un detenido por atentado a la autoridad y varias propuestas de sanción por incumplimientos. Sobre la 01.30 horas , 300 personas estaban en el entorno de la calle Cardenal Almaraz sin distancia de seguridad y con escasez de mascarillas, según aseguraron fuentes de la Policía Local consultadas a Ical, por lo que patrullas tanto de la Policía Nacional como de la Local tuvieron que desplazarse para disolver al grupo.

La intervención para disolver esta aglomeración se ha producido entre insultos y lanzamientos de objetos . La actuación policial se llevó a cabo para evitar una macroconcentración que no garantizara las medidas de seguridad vigentes, además de ser la hora máxima de cierre de los establecimientos de ocio nocturno de la zona.

El subdelegado del Gobierno en la provincia, Ángel Domingo Miguel , ha asegurado que «falta responsabilidad personal» y teme un incremento de contagios dentro de 15 días ante los botellones y fiestas descontroladas. Asimismo, también aseguró que seguirán controlando las aglomeraciones. «La acción policial va a continuar, porque todavía se está en fase de pandemia», defendió.

El subdelegado también ha precisado que «aunque jorobe y no sea nada agradable», la labor que hace la Policía es «colaborar con las autoridades sanitarias para evitar que haya contagios». «Aunque haya muchas ganas de divertirse, pero si falla la responsabilidad, ya no queda nada. Estamos en un país libre y no se puede convertir en un estado policial. No hay más remedio que llamar a la responsabilidad de las personas».

En el caso de Cuéllar, como ya denunció el jueves el Ayuntamiento , la Policía Municipal trataba de hacer una labor de prevención para evitar la concentración de personas en algunas calles y garantizar la seguridad de la ciudadanía cuando unos pocos irresponsables les recibieron con «el lanzamientos de objetos y continuos abucheos hacia los agentes y sus vehículos».

Bajo la normativa vigente y sabiendo del ambiente festivo, desde el Consistorio cuellarano indicaron que « hay que ser conscientes de que estas concentraciones , donde la gente está muy exaltada en buena parte por los efectos de las bebidas alcohólicas, sólo pueden ser disueltas con una actuación contundente y el uso de la fuerza que puede ocasionar un problema mayor del que se pretende resolver».