Sucesos
Dos policías se juegan la vida en el agónico rescate de una joven en el Ebro
Evitaron que muriera ahogada en Zaragoza. En plena noche, se lanzaron a las crecidas aguas del Ebro para rescatarla
Dos policías nacionales, uno de ellos un joven agente en prácticas, se jugaron la vida la pasada noche en Zaragoza en el agónico rescate de una mujer que se estaba ahogando entre las crecidas aguas del Ebro . Ambos se lanzaron a las fías aguas del río, que estos días lleva un gran caudal, al haber sufrido un episodio de riada. Lograron alcanzar a la mujer y sacarla del río, consciente.
El incidente se produjo poco después de las diez de la noche de ayer martes. Una mujer pidió ayuda a una patrulla de la Policía Nacional que se encontraba en la zona del zaragozano puente de la Almozara. Les alertó de que una joven pretendía tirarse al Ebro.
Los agentes lograron agarrarla por las muñecas y, a duras penas, entre los barrotes del vallado del puente, intentaron sujetarla el mayor tiempo posible para tratar de ponerla a salvo. Pese a los desesperados intentos de los policías por mantenerla agarrada, la joven finalmente cayó al Ebro.
Nada más caer la joven al Ebro, intervino una segunda patrulla que, rápidamente, bajo hasta la orilla para tenerla localizada e intentar rescatarla. Estos dos agentes vieron que la fuerte corriente estaba arrastrando a la mujer, que gritaba mientras aguantaba, a duras penas, mantener la cabeza fuera del agua.
Al ver que podía perecer y ser arrastrada sin remedio, uno de los agentes se lanzó al agua, nadó hasta la mujer y logró alcanzarla. El compañero de patrulla, un joven agente en prácticas, se metió también en el río en ese momento al agua para ayudar a su compañero y a la joven, y conseguir que todos alcanzaran la orilla y quedaran a salvo. Tras unos agónicos instantes, los tres lograron salir del río.
El agente que se lanzó al río para alcanzar a la joven tuvo que ser trasladado a un centro hospitalario para ser asistido por hipotermia. Los dos policías que habían intentado que la joven no cayera al Ebro también tuvieron que ser atendidos por los servicios sanitarios, por las lesiones que sufrieron en sus extremidades.
