"Spindrift 2" a menos de 1000 millas

En su quinto día de navegación, el maxi trimarán Spindrift 2 de Dona Bertarelli y Yann Guichard encaraba esta mañana las últimas 1.000 millas de un recorrido que, en su salida desde Cádiz contaba teóricamente con 3.884 millas en una ruta directa. Las largas trasluchadas de los alisios ya han permitido al maxi trimarán acumular 3.550 millas recorridas, a una increíble velocidad media de 29,9 nudos, que serían 25,7 nudos en una teórica ruta directa. Así pues, estos dos primeros tercios del recorrido, con un escenario casi ideal de vientos del este-nordeste estables han permitido al trimarán de competición más grande del mundo y a su tripulación compuesta por trece hombres y una mujer exprimir al máximo su gran potencial.

Pero Dona y sus trece descubridores ya han superado la parte más amable del recorrido y hoy se abre ante ellos una fase muy estratégica con un viento cada vez más débil. Se acabaron por ahora las largadas a cuarenta nudos. Ha llegado la hora de decidir una trayectoria eficaz y manejar el timón con un viento que cada vez se aproxima más a ese cuello barómetrico que señalaban los especialistas, una zona de transición entre dos sistemas de viento, que deberán atravesar para esperar a rachas más fuertes a lo largo de Norteamérica. Yann Guichard, Dona Bertarelli y Erwan Israel, que constituyen el núcleo de a bordo a cargo de la navegación, en contacto con Richard Silvani de Méteo France en tierra, estuvieron reflexionando sobre sus futuros movimientos durante la jornada de ayer. La decisión de tomar una ruta más cercana a la ruta directa se ha impuesto por sí misma. “Dirigirse hacia el oeste lo más rápido posible”, ésas son las órdenes de Yann para las próximas 20 horas. “Una zona de bochorno de unas 400 millas de longitud nos separa del próximo sistema ventoso. No hay que dudarlo más, hay que avanzar lo más rápido posible y lo más cerca posible de la ruta directa.

La vida a bordo de Spindrift 2 ha cambiado bastante en pocas horas. A las millas fácilmente ganadas por este pájaro gigante blanco, negro y dorado a más de 30 nudos de velocidad sobre la cresta de las olas le ha sucedido una progresión más laboriosa ocasionada por las 25 toneladas de un gigante luchando con menos de diez nudos de viento, o en medio de una tormenta, como ocurrió la noche pasada, complicando aún más la vida del equipo con bruscos cambios en la fuerza y dirección del viento en medio del chaparrón.

“Hay que trabajar duro, aprovechar la menor ráfaga para ganar millas hacia el oeste”, recalca Yann Guichard. “El mar se ha calmado y estamos exactamente sobre la ruta. Estamos prestando la máxima atención a los reglajes, y aunque no hemos cambiado nuestro ritmo de vida, cada uno de nosotros está velando por cada detalle que pueda ayudar a que la navegación de los patrones sea cada vez más fina”.

Ésta es la mayor inquietud  que existe entre la tripulación, que disfruta de un ambiente amistoso y profesional a bordo. Pero todos son conscientes de que las algo más de 300 millas de ventaja que llevan de ventaja sobre el anterior récord (Groupama) no les sobrarán al final de su recorrido. Un final que Yann se niega por el momento a precisar. “Todavía nos quedan dos buenas jornadas, es difícil ser más preciso en estos momentos.”

Se avecina una jornada crucial. Spindrift 2, el trimarán de competición más grande del mundo se ha enfrentado a las condiciones menos idóneas para la envergadura de este devorador de los océanos. "Gracias a la altura de nuestras velas podemos buscar rachas más altas, porque a ras de mar no hay mucho viento”, señala Yann. En el calor húmedo de estas latitudes, aún más cálidas en esta estación, Spindrift 2 ha escrito una nueva línea en su aventura tras las huellas de Cristóbal Colón, más tensa, más nerviosa y ciertamente más exigente mentalmente. “A fondo, hasta la línea”, puntualiza Yann Guichard.

Mensaje nocturno de a bordo: 

Buenas noches,

27°52.25N, 54°45.30W, en algún lugar en medio del Atlántico, el Maxi Spindrift 2 enfila su quinta noche negra. Y es que desde el inicio de esta tentativa de récord de la Ruta del Descubrimiento las noches son totalmente negras, sin luna alguna que esclarezca este gran terreno de juego. Los tripulantes de Spindrift 2 escrutan el cielo y el radar para avistar tormentas, mientras que el patrón confía en su sensación de equilibrio y en los grandes números rojos que desfilan en el contador para mantener la buena marcha. Y sí, después de dos noches la meteorología nos pone algunas trampas, haciéndonos entrar en fenómenos tormentosos que, en función de nuestra posición respecto a ellos, hacen caer o aumentar el viento súbitamente. Vigilancia y reactividad son ahora los nombres clave a bordo. Buenas noches, Xavier.

A las 9:00 horas GMT (10:00 hora de París) esta mañana, Spindrift 2 disponía de una ventaja de 317,07 millas sobre el tiempo de referencia.