Primera Iberdrola

Un desencuentro de difícil arreglo

Mañana, futbolistas y patronal se reúnen en un último intento por evitar la huelga

Jugadoras del Barcelona celebran un gol EFE

A la izquierda del árbitro, las futbolistas; a la derecha, la patronal. Y en medio, un balón en forma de convenio colectivo que no encuentra portería. Ellas demuestran cada día que su profesionalidad está fuera de toda duda. Pero la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino (AFCC) remarca que, a pesar del empuje de los últimos años, las ligas femeninas no generan tantos recursos como para satisfacer lo que las jugadoras merecen. Y así, mañana habrá una nueva reunión, a las 10.30 de la mañana, con los sindicatos, la patronal y los tres equipos que no están asociados (Barcelona, Athletic y CD Tacón) con el Servicio de Interconfederal de la Mediación (SIMA) para llegar a un acuerdo al límite que evite una huelga de la Primera Iberdrola que todos lamentan y nadie quiere en realidad. Si no hay acuerdo, el parón se produciría en el fin de semana del 16 y 17 de noviembre.

«No queríamos llegar a esta situación, me hubiera gustado que en un par de negociaciones o tres se hubiera llegado a un acuerdo. Creo que lo que pedimos son unos derechos mínimos como trabajadoras », aseguró Ainhoa Tirapu el martes tras el anuncio de huelga . Porque han sido 18 reuniones desde el 4 de octubre de 2018 sin que haya habido avances sustanciales. No es solo el salario mínimo, que muchas de las jugadoras de Primera ya perciben, sino en otros aspectos que consideran básicos.

El escollo principal, la parcialidad. Las futbolistas reclaman a través de los sindicatos (Asociación de Futbolistas Españoles, UGT y FutbolistasOn) un 75% de la jornada -12.000 euros-, pero la ACFF se refugia en la inviabilidad: « Si se generaran más ingresos seríamos los primeros en aumentar la cantidad . Pero hoy, lo que se ajusta a la realidad son los 8.000 euros anuales -el 50% de la jornada- que podemos ofrecer. Y mejorar conforme se incrementen los ingresos», contrapone Rubén Alcaine, presidente de la ACFF. «Somos conscientes de que hay clubes que no pueden llegar donde otros por la estructura que tienen detrás. No queremos dinamitar el fútbol femenino, pero tampoco queremos que se enriquezcan a nuestra costa», zanja Tirapu. La Federación Internacional de Futbolistas Profesionales (FIFPro) respalda su lucha y la huelga. Y queda pendiente el 6 de noviembre, otro encuentro con la Federación de Fútbol. El balón sigue en el aire.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación