¡Cinco goles de Lewandowski en solo nueve minutos!

Noche histórica en la Bundesliga. Nunca antes un jugador había logrado anotar ¡cinco goles en nueve minutos! El genio en cuestión fue Robert Lewandowski, el delantero centro del Bayern de Múnich que acudió al rescate de los suyos tras una discreta primera parte del conjunto de Guardiola en su duelo contra el Wolfsburgo. El conjunto muniqués se fue a los vestuarios con una derrota por la mínima... y gracias. Al tanto de Caligiuri, se le pudo unir otro de Guilavogui tras una temerosa acción de Neuer que silenció el Allianz Arena.

[Bayern-Wolfsburgo en directo]

A la media hora de partido, el portero alemán decidió salir a por un balón al espacio, pero no midió correctamente su posición en el campo y acabó perdiendo la pelota en el centro del terreno de juego ante el centrocampista francés, cuyo disparo desde sesenta metros pasó rozando el palo derecho de la portería del Bayern.

Tras el refrigerio, Guardiola sustituyó a Thiago Alcantara, bastante desacertado, y recurrió a Lewandowski para darle la vuelta al marcador, y la decisión no pudo ser mejor.

El delantero polaco le dio la vuelta al encuentro y lo sentenció en un abrir y cerrar de ojos: cinco goles en nueve minutos (51’, 52’, 55, 57’ y 60’). Guardiola, tras anotar su pupilo el quinto tanto, se llevaba las manos a la cara atónito ante la exhibicción de Lewandowski, que se convirtió anoche en el primer jugador en la historia de la Bundesliga en anotar una manita de goles en menos de diez minutos.

De todos los colores

El primer tanto del polaco vino a los seis minutos de la reanudación: balón suelto en el área y de primeras, con su bota izquierda, empató el encuentro. El 2-1 lo hizo solo sesenta segundos después, con un disparo raso desde 25 metros contra el que nada puede hacer Benaglio. El tercero llegó en el 55’, tras aprovechar un error del portero suizo, que deja el balón muerto a los pies de Lewandowski que con su pie derecho empujó la pelota a las mallas. El póquer lo logró dos minutos después, tras volear desde el punto de penalti un centro de Douglas Costa. La manita la cerró con el mejor tanto de la velada: tijereta desde la medialuna del área que provocó el éxtasis en el estadio muniqués.

No es la primera vez que Lewandowski se desata con un carro de goles. Ya en la Champions 2012-2013, cuando militaba en el Borussia Dortmund, anotó los cuatro tantos en el partido de ida de semifinales contra el Real Madrid (4-1).