María González: «Para el 2017 el Mes de Danza contará con mayor presencia europea»

Este fin de semana concluye la 23 edición del Mes de Danza, una edición caracterizada por el éxito sobre todo, de los espectáculos de calle que jalonados por el buen tiempo, han reunido a un variopinto público de todas las edades, incluidos numerosos turistas sobre todo en las actuaciones en el casco histórico.

El festival presenta este fin de semana sus últimas propuestas. Hoy viernes y mañana sábado, el estreno en la sala la Fundición de «Clay» con Asha Thomas & Yinka Esi a las 21.30 horas. También en la Fundición, pero en horario de mañana a las 12 horas, la función para niños de la compañía de Roberto G. Alonso, «Almazuela (bajo las sábanas)». El domingo la programación se clausura con el tradicional «Ahora bailo yo» que este año se celebrará a las 12 horas en el Antiquarium.

Varios hitos ha tenido esta edición como son el uso de espacios singulares como el Archivo de Indias o la actuación de la Cía Danza Mobile en la prisión Sevilla 1, así como la pista de skate de Plaza de Armas o las funciones en la cadena hotelera del Petit Palace de Sevilla. Y en salas, propuestas como las de Pere Faura o Alberto Cortés, entre otras, han tenido gran aceptación por parte del público.

Para la directora del certamen, María González, «las propuestas de este año han estado plagadas de ironía, humor y cierta dosis de autocrítica. A medida que iba viéndolas me dí cuenta de que había un gran número de artistas que habían incluido estas sensaciones en sus obras». El festival, que se ha venido celebrando desde el pasado 26 de octubre hasta el domingo 6 de noviembre, ha presentado 43 funciones de 22 compañías en 27 espacios, entre calle, salas y teatros.

María González destaca la buena aceptación por parte del público de la programación, «sobre todo del ciclo danza en espacios singulares. Hemos detectado que cada vez más tenemos un público de franja de edad más amplia. Son más mayores los que se acercan a la danza contemporánea, tanto en la calle como en salas. También la presencia de los turistas es muy relevante. En salas, debemos seguir trabajando. No ha habido ninguna tragedia y las compañías se han visto arropadas, pero sí es verdad que los segundos días de las funciones han sido flojas. Eso también tiene que ver con que no tenemos ningún soporte de publicidad que abarque toda la ciudad, y eso sería importante: mupis o banderolas que puedan llegar a Sevilla Este o a Pino Montano, a toda la ciudad. En este aspecto debemos hablar con el Ayuntamiento».

La valoración artística del certamen es para María González muy positiva, sobre todo por la presencia de compañías que estrenaban en Sevilla, «aunque destacaría por varias razones el espectáculo de Alberto Cortés porque en la primera función ocurrió algo muy emocionante y es que todas las compañias presentes en el Mes de Danza, y eran muchas, fueron a ver a Alberto Cortés y salieron conmocionadas por el discurso de Alberto, un discurso que habla del ego del artista. Fue un momento muy especial, porque daba también la sensación de comunidad dancística, y eso también se pretende conseguir dentro de un festival: el encuentro y el diálogo de la comunidad artística y que se conozca el trabajo de los compañeros. De hecho el trabajo de Alberto Cortés nunca se había visto en Sevilla. También destacaría la propuesta de Celeste González, «Ballet vs porno», una propuesta que ha sido quizás un poco chocante para cierto tipo de público, pero que a mi me parece valiente y dice cosas importantes una vez asimiladas las imágenes que nos proponía. En la calle creo que hemos hecho una selección de los espacios, y eso nos lo han agradecido las compañías. Todas quieren volver».

El domingo, cuando el tradicional «Ahora bailo yo» ponga fin a la edición 2016 del festival, María González empezará a preparar la número 24 que ya está en su cabeza. «Sí, si, tengo muchas cosas y muchas propuestas planteadas para el año 2017. Está sobre todo Shapers, el proyecto europeo en el que nos hemos enganchado este año, y también el trabajo en proceso presentado en 2016 de Miguel Marín y Laura Morales que se verá en su propuesta final. Y tengo otras cosas, incluso la inauguración, que sé más o menos cómo va a ser».

En lo que no habrá muchos cambios será en el número de días o de espectáculos o número de compañías, «en este sentido no puede haber cambios a menos que alguna administración duplicara su aportación al festival, porque más con el presupuesto que tenemos es imposible de hacer. Lo que sí me gustaría es que la Junta de Andalucía se comprometiera más con el proyecto, además de aumentar su aportación y, sobre todo, saber con antelación cuánto va a ser, porque de esa manera podremos comprometernos con obras internacionales y con compañías con mucha antelación».

Lo que sí asegura la directora del festival es que la edición 2017 será mucho más internacional, «porque seguiremos estando en el proyecto Shapers y eso nos asegura la presencia de compañías de varios países de Europa».