La portera goleadora

Sandra Paños, meta del Levante y de la Selección, chutó desde más de 40 metros para marcar el 3-2 ante el Español

Sandra Paños protagonizó el partido soñado seguramente para una portera. Fundamental para el Levante bajo palos, en los minutos finales del partido de su equipo ayer contra el Español ganó un cara a cara a Bárbara, que podría haber significado el 2-3 para las catalanas y luego, a tres minutos de que el tiempo se acabará, sacó desde más de cuarenta metros una falta con la que sorprendió a Irina, su homóloga en la meta españolista, para poner el 3-2 definitivo. Triunfo del conjunto azulgrana con la guardameta de la Selección española, que el próximo miércoles disputará un amistoso contra la República de Irlanda, como piedra angular.

Resuenan nombres de porteros goleadores como Rogerio Ceni –especialista desde el punto de penalti–, Chilavert –brillante en el libre directo–, Higuita o Campos, entre otros. Un golpeo especial, brillante, potente, con clase el de estos. Pero Sandra Paños tomó todavía más distancia para marcar el tanto de la victoria ante el Español. Más de cuarenta metros en el polideportivo de Nazaret y su chupinazo se fue a la red de Irina. La portera alicantina tiene en sus prestaciones sobrada calidad para jugar el balón con los pies. Tanto con el derecho como con el izquierdo. Potencia y precisión. Y así llegó un gol mayúsculo para sumar tres puntos importantes ante las españolistas.

De fondo, el partido del Levante no fue bueno. Más bien gris. Estancado en el medio campo, sin la presumible fluidez que le debiese haber dado Alba, cayó en pérdidas horizontales en el primer tramo del encuentro que significaron veloces recuperaciones del Español para no sólo llevar peligro a la meta de Paños, sino lograr dos goles –de Lombi, primero, y de Andrea, poco después, de penalti–.

El Español llegó con las ideas claras. Bien estructurado de atrás hacia adelante, solvente en su sistema defensivo, esperó para salir al contragolpe. El Levante tenía el balón, pero su fútbol era espeso, gris, con excesivo balón cruzado cuando se fue a lo directo, y con demasiada horizontalidad cuando quiso rasear. Antes del descanso, no obstante, Olga recortó distancias en el marcador (1-2).

La sala de máquinas del Levante no funcionaba. Protagonista con el balón pero de forma inocua. El Español replicaba a la contra, pero encontraba con Sandra. Olga empató en el 69. Las azulgrana se quedaron sin Prim por expulsión. Cuando el tiempo se esfumaba, Paños salvó ante Bárbara y luego lanzó un cañonazo a la red para el 3-2 definitivo.