La (in)compatibilidad del trabajo y la maternidad

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Marta Belenguer, Lucía Jiménez, Carolina Solas y María Vázquez protagonizan la obra «Femenino y Singular» en una humorísrica reflexión sobre cómo conciliar la maternidad con el trabajo.

La función, que ha sido escrita por las cuatro intérpretes femeninas, nació en el parque de San Isidro en el barrio madrileño de Carabanchel, donde residían las cuatro actrices, cuando todas comenzaron a compartir ratos y tardes.

«La obra la hemos escrito nosotras, es nuestra vida. El espectáculo es totalmente autobiográfico, es lo que hemos escrito cada una sobre su experiencia», asegura Lucía Jiménez. Sin embargo, cada una de ellas interpreta la vivencia de otra lo que, a su juicio, permite «más libertad y diversión».

Cuando comenzaron a crear la producción teatral era «muy complicado» porque suponía «escribir sobre tu vida».

«Cuando llegábamos al local de ensayo y leíamos lo que habíamos escrito nos poníamos a llorar todo el rato porque era tan emocionante recordarlo».

Además, la obra cuenta con números musicales de playback y karaokes y «muchas risas» porque es «un espectáculo para divertirse pero del que sales con mucho tema de conversación».

Reiniciamos el año senderista con una ruta un tanto peculiar, pues acostumbrados al inicio de la misma por un terreno montaraz, para esta ocasión hemos elegido un trayecto inicial más humanizado, con bancales cultivados, camino cómodo, entorno frondoso y revueltas en zigzags. Tras un cómodo paseo, pasamos a remontar el camino de la mina o de la umbría, cuya toponimia se debe al aspecto de esta ladera bien cubierta de fronda, un camino antaño unía Artana con Alfondeguilla, donde se encuentran varias minas excavadas en las entrañas de este cordal. Nuestro primer hito se encuentra en el punto kilométrico 3.970, donde una senda tallada en la misma roca nos remonta a la primera paleta de direcciones; nosotros elegimos seguir de frente, desde un balcón natural con vistas a un valle, donde se levantan la Femella y la Mallaeta. Después de varias lazadas en descenso abocamos a la colada del Coll Roig, con el objetico de encumbrar las lomas cimeras de Yosti.

Ver los comentarios