CÁDIZ CF
Pepe Mejías: «Me hubiese gustado entrenar a algún equipo de la cantera del Cádiz CF, pero ya no me veo»
«Me quedé con las ganas de retirarme en casa», asegura el mítico exjugador cadista en los micrófonos de 'Deportes COPE Cádiz'
25 años se han cumplido ya desde la retirada de los terrenos de juego de Pepe Mejías , el que para muchos ha sido el mejor jugador del Cádiz CF de toda su historia. Unas Bodas de Plata del último pase de un futbolista de enorme talento que, aunque colgó las botas en Conil, siempre será historia viva del Cádiz CF. Todo ello sin olvidar su paso por Zaragoza, Elche, Murcia, Rayo Vallecano y San Fernando.
El gaditano atendía este martes a la 'Cadena COPE' y señalaba: «He llevado bien el confinamiento en mi casa y con mi señora. Ahora que se va reuniendo la familia han podido venir mis hijos, mis nueras y mi nieto». Ahora con la vuelta del fútbol a la pequeña pantalla se encuentra más animado. «Es penoso ver partidos sin público, es una situación muy rara. Es lo que pensé viendo el Borussia Dortmund-Schalke 04, pues nunca he disputado un partido a puerta cerrada. Tiene que ser mortal porque parece más un partidillo de entrenamiento. Pero nos quedamos con la vuelta, ya que se echa mucho de menos el fútbol», aseguraba. Y recalcaba: «A todos nos viene bien. La distracción nos hace falta en estos momentos tan difíciles».
Ahora Pepe Mejías echa la vista atrás. Por eso no dudaba en relatar: « Me supo mal no haberme retirado en el Cádiz CF. Pensaba retirarme en casa y no pudo ser. SúperPaco me lió, acabé en el San Fernando y ascendí con el San Fernando, aunque al final no renové, lo dejé y me fui con los veteranos. Y después de un partido de veteranos terminé en el Conil mi trayectoria». Un equipo jandeño al que siempre le guardará un enorme aprecio: «Le tengo mucho cariño al Conil. Es un equipo que mereció mi retirada a los 36 años en la temporada 1994/1995».
Al recordar su salida del Cádiz CF, Pepe Mejías puntualizaba: «La gente no sabe ni la mitad del trato que yo tenía con el presidente Manolo Irigoyen. La verdad es que siempre me daba coba porque me podía más el Cádiz CF que el dinero ». Y destacaba: «Acabé bien porque fueron muchos años de trato. Tengo mucho aprecio y cariño a sus hijos, estuve con él cuando le dio el infarto y él siempre fue cariñoso en el tema personal y, aunque nos daba sitio a los canteranos, económicamente no era lo mismo. Era un hándicap que tenía y vivíamos con eso».
Asimismo recordaba que «vine teniendo un año de contrato con el Rayo Vallecano y cobrando un dinero fijo pero corto. Esperaba que me renovaran porque jugué más de 25 años, aunque me quedé con las ganas de retirarme en casa ». Pero eso ya es pasado y ahora se siente agradecido: «Ha merecido la pena porque al final Vizcaíno me ha dado mi sitio en el Cádiz CF y estoy muy contento. Es un homenaje».
Con su inseparable hermano
Tampoco olvidaba su conexión con su hermano Salva. « Pasamos muy buenos años y lo disfrutábamos. Eramos gente de casa y lo disfrutamos. Luego mi hermano Salva me abrió las puertas del Real Murcia en Primera y contaron con mis servicios. Yo estuve dos años en el Zaragoza y me quedó un buen recuerdo, pero no tenía el beneplácito del entrenador. Yo quería jugar y por eso me fui», relataba.
Al tiempo que apuntaba: «Él salió jovencito del Cádiz CF y yo salí con 27 años. Disfruté mucho con él porque hemos estado mucho tiempo juntos pese a los cuatro años de edad de diferencia. Mis padres disfrutaron desde el principio, mis hijos también lo vivieron y la gente gozó con nuestro juego. Tuvimos la inmensa suerte de hacer lo que nos gustaba y hacer disfrutar a la afición».
En resumidas cuentas, muchos años de éxitos en los que «tuve la suerte de jugar entre Primera y Segunda en los 70, 80 y 90. He disfrutado como un 'condenao' al coincidir con jugadores como Maradona, Cruyff, Schuster, Laudrup, Butragueño, Figo...». También de «jugar ante Real Madrid y Barcelona porque siempre era un aliciente. Se llenaba el campo y poníamos las cosas difíciles. Siempre fueron equipos diferentes a los demás, equipos con personalidad propia».
De jugadores gaditanos «es difícil quedarme con alguno. Ricardo Escobar, a lo callado, fue una pieza muy clave. También el 'Tarugo' Mané. Fuimos cadistas con poco dinero y sufriendo mucho. Y no puedo olvidar a otros como Juanito Mariana, Manolín Bueno...».
Finalmente aseveraba: « Nunca tuve ese hambre de ser entrenador del Cádiz CF, pero sí me quedé con las ganas de entrenar a un equipo de la cantera , aunque estuve con Arteaga de segundo entrenador. Lo hice en Conil, aunque me quedo con esa 'espinita' pero ya no me veo . Me veo más organizando campus con el Cádiz CF y demás. También con los más pequeños por su ilusión. Disfruto más con ello».
