Cádiz CF
Enésimo martillazo judicial
El Cádiz recurrirá una sentencia que le obliga a indemnizar a una empresa de jardinería a quien no abonó sus servicios
Nuevo varapalo judicial a la gestión de Manuel Vizcaíno, presidente de un Cádiz CF que cada vez que acude a un tribunal acaba aflojando euros en forma de indemnizaciones. Juan Carlos Cordero, Enrique Labrador, Paco López... La lista no es corta, y el dinero que se ha consumido en este tipo de causas no es baladí.
Pero en esta ocasión, l a indemnización que tendrá que pagar ahora el Cádiz CF nada tiene que ver con hombres de Quique Pina , como eran todos los anteriormente citados, sino con una empresa de jardinería que se contrató para el mantenimiento de sus campos de fútbol desde el 1 de octubre de 2011 al 28 de abril de 2016, una primera fecha donde la gestión correspondía a Sinergy y de la que tuvo que hacerse cargo Locos por el Balón.
De hecho, Locos por el Balón, que llega al club con la subasta del 3 de diciembre de 2013, no dudó en cambiar de empresa de mantenimiento para mejorar las condiciones de sus campos de fútbol, tanto el de Carranza como los del Rosal. Y a decir verdad, el estado de los campos mejoró ostensiblemente con Locos al frente de la entidad.
El caso es que una reciente sentencia del Juzgado 1 Instancia 2 de Cádiz condena al Cádiz CF al pago de la suma de 235.972 euros , mas los intereses desde abril 2016, con condena en las costas. Igualmente la demanda desestima la reconvención planteada por el Cádiz CF por importe de 447.941 euros tambien condenando en costas al club.
Según lo pactado en dicho contrato con Sinergy, la empresa Golf & Tuf Management, S.L., se hacía cargo de todos los campos del Cádiz CF antes citados -incluidos los dos de césped artificial, lo que no le fue fácil debido a la proliferación de malas hierbas.
Según la sentencia, el Cádiz CF no abonó la cantidad por los servicios de la empresa y tampoco acabó con el problema ya que firmó varios documentos en los que reconocía la deuda adquirida tanto en tiempos gestionados por 'los italianos' como después ya con Locos al frente de club..
En la sentencia, a la que ha tenido acceso CANAL AMARILLO, consta que el césped de Carranza era problemático desde el principio de la relación entre la empresa de jardinería y el club ya que era del tipo Ray Grass, un material poco idóneo para las temperaturas del sur de España.
Además, el terreno de juego se tuvo que cambiar en 2013 debido al concierto de Alejandro Sanza de aquel verano, pero el asunto no mejoró y tal y como recoge la sentencia el Cádiz CF no dio queja alguna. «Salvo el problema de las malas hierbas y la modalidad de césped no adecuada al clima, no consta acreditado por ningún medio que el césped del Estadio Carranza estuviera en mal estado antes del concierto de Alejandro Sanz, ni consta acreditado un defectuoso mantenimiento. Ninguna queja por escrito se presenta por el Club a la entidad actora durante los años 2011 y siguientes», resuelve la sentencia firmada por la magistrada María Isabel Cadenas Basoa.
Fue pasado el concierto del que fue pregonero del Carnaval, cuando el Cádiz CF decide cambiar el material. «Ha quedado acreditado también en la vista que, tras resolverse el contrato de mantenimiento con la entidad actora, el Cádiz CF acometió una sustitución del césped del Estadio Carranza, pasando del tipo anterior, Ray Grass, a un tipo de césped llamado Bermuda, mucho más adaptado al clima de Cádiz, que está dando muy buenos resultados».
Para su fallo, la magistrada hace constar que «ninguno de los informes [presentados] es determinante para acreditar si durante los años 2011 a mayo de 2016 el estado del césped fue deficiente, si esa deficiencia dificultaba la práctica de juego de fútbol, como exige la cláusula primera de los contratos de 2011 y 2012, y si las anomalías que pudiera tener la hierba se debió a un defectuoso cumplimiento de las labores de mantenimiento, o si se pudo deber a la no adecuación del tipo de césped con el clima de la zona».
Como no puede ser de otro modo, el Cádiz CF recurrirá la sentencia y volverá a recordar un defectuoso servicio de mantenimiento tal y como se puede comprobar en años en los que hasta se tenía que pasar el rodillo al césped de Carranza para tratar de allanarlo.
