Efectos de la Guerra

Paro indefinido de la flota de cerco de Barbate por la subida del precio del combustible

Los pescadores lamentan que ya ha dejado de ser rentable salir a faenar con los precios del gasóil

Los barcos permanecerán amarrados a puerto hasta que la Administración habilite ayudas

Aspecto que presentaba este miércoles el muelle de Barbate con los barcos de cerco amarrados FRANCIS JIMÉNEZ

Javier Rodríguez

Los efectos de la invasión de Ucrania por parte de Rusia ya se notan de forma directa en nuestros bolsillos. La subida de los combustibles se ha disparado desde que comenzó el conflicto bélico, aunque España ya inició en enero el recorte de las importaciones de crudo procedente de Rusia . Las consecuencias de esta merma se advierten en la escalada alcista que están experimentando los precios. La situación se hace insostenible para los profesionales del volante, pero también para la flota de pesca.

Los barcos de cerco de Barbate han decidido este miércoles permanecer amarrados a puerto hasta que alguna administración les ofrezca alternativas para poder salir de nuevo a faenar. Diez barcos de la localidad han iniciado un paro indefinido ante la imposibilidad de hacer frente a los gastos del gasóil. El armador Tomás Pacheco ha reconocido a LA VOZ que no es rentable echarse a la mar con los precios actuales del combustible. Los pescadores pagaban antes de 0,35 euros por litro de gasóil mientras que ahora el litro se ha colocado en 1,10 euros. Según Pacheco, los barcos de cerco de Barbate se sitúan a unas 40 millas de la costa para pescar y «mover una embarcación en estos momentos sale por 1.500 euros aproximadamente».

Según los armadores, la pesca de sardina, jurel y boquerón «no da para cubrir con esta subida». De hecho, la flota lleva semanas sin faenar en aguas del caladero marroquí para ahorrar en consumo de carburante.

Los pescadores han hecho un llamamiento al Gobierno a través de Cepesca para que habilite ayudas y soluciones para poder pagar el combustible que necesitan sus barcos. Pacheco señala que unas 200 familias viven de la pesca de cerco en Barbate y no se descarta que otras cofradías de la provincia se sumen a este paro obligado por la subida de los carburantes.

Los pescadores reconocen que la rentabilidad del negocio es nula, ya que el pescado sigue con precios muy bajos como para poder compensar la subida de los costes de explotación de la flota. Pacheco ha adelantado que los barcos de Barbate se sumarán a la huelga indefinida que ha convocado para el lunes 14 de marzo la Plataforma en Defensa del Transporte de Mercancías por Carretera.

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