La Junta concluye que no puede reclamarse a sí misma

La Junta de Andalucía ha perdido los primeros 90.000 euros que entregó para dar un curso de formación a los parados que nunca se impartió. Así lo reconoce oficialmente en una resolución del pasado 10 de julio dictada por la delegación territorial de Educación en Málaga donde se declara extinguida la obligación de reintegro para esta cantidad, ya que el dinero público se concedió a la Faffe, la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo en 2009, y esta entidad está ahora integrada en el SAE, el Servicio Andaluz de Empleo, por lo que el acreedor y el deudor son la misma persona jurídica. Es decir, la Junta de Andalucía a fin de cuentas.

Esta resolución sienta un precedente claro y que puede ser gravoso para las arcas públicas ya que abre la puerta a que ocurra lo mismo con todas las subvenciones que se concedieron y que se están reclamando por irregularidades, tanto a esta fundación como a los consorcios de formación para el empleo.

Hay que tener en cuenta que sólo entre los años 2007 y 2009, la Junta concedió a la Faffe 134,3 millones de euros, aunque no todos estos fondos se están reclamando por irregularidades.

Una situación similar a la de esta fundación es la que se produce con los consorcios de formación para el empleo, a los que se les concedieron unos cien millones de euros, una buena parte de los cuales la Junta les reclama por irregularidades en la organización de los cursos. Estos consorcios también se han integrado en el Servicio Andaluz de Empleo por lo que no se sabe qué puede ocurrir con las subvenciones cuyo reintegro se pide. Pero se estaría en el mismo caso, la Junta no puede ser acreedora y deudora al mismo tiempo.

La resolución firmada por la delegada territorial de Educación, Cultura y Deporte de Málaga detalla que se concedió una subvención de 93.339 euros a la Faffe para la organización de un curso de maquinista conductor de ferrocarril el 28 de septiembre de 2009. Dos meses después, se transfirieron 70.079 euros como anticipo para organizar este programa formativo.

Pero hubo un cambio de planes y en mayo de 2010 se dio de baja ese curso sustituyéndolo por otro de chapista pintor de vehículos, el cual tampoco se impartió por lo que la Faffe renunció a dicha subvención y se inició el correspondiente expediente de reintegro. La burocracia del sistema de los cursos de formación es tal que la Junta le reclama en 2014 oficialmente el dinero entregado por adelantado (70.079 euros) más 20.149 eurospor intereses de demora.